No ayudar a vomitar, contra ana, contra mia

La información es poder y la libertad de expresión a veces muy peligrosa. Sorprendió bastante que los anuncios de la marca Dove los protagonizaran chicas normales promocionando la autoestima. La publicidad tiene un poder sobre nosotros todavía por cuantificar. Eso se puede apreciar en este vídeo que ha colgado en su blog Julio Alonso.

Como veis, una niña preciosa recibe mensajes confusos sobre la imagen o el aspecto físico, algo primordial en la sociedad actual. Cuando eres pequeño, cuando todavía no estás formado, cuando estás aún por desarrollar, cualquier cosa puede inclinarte a favor o en contra de algo, depende de muchos factores.

Luego con el tiempo, te das cuenta de que la piel se arruga y que tu espalda se encorva y rezas para que la diabetes o la artritis no te pille demasiado pronto. También te percatas de que lo único que puede mantenerse joven es tu mente y que sólo tu formación cultural puede seguir creciendo.

Está circulando por Internet una iniciativa que intenta desbancar de los buscadores las páginas pro anorexia y pro bulimia. Aunque también se utilizan jergas como “pro ana” (pro anorexia) o “pro mia” (pro bulimia), es tan fácil como poner “cómo vomitar”, “pro ana” o “como engañar comida” para que aparezcan miles de blogs y foros maliciosos que realizan apología de la anorexia, abusando del derecho a la libertad de expresión que ofrece la red de redes.

Las autoridades judiciales no tienen la agilidad necesaria para cerrar estas webs, tardan demasiado en eliminarlas y los grandes buscadores como Google y Yahoo! no deben dedicarse a censurar los resultados. Tan solo el riesgo a que se censure algo equivocadamente es justificación suficiente para que no hagan nada. En cualquier caso solo conseguirán eliminar temporalmente estas páginas, y pronto aparecerían más.

Los bloggers, webmasters y cualquier página web se pueden unir a esta propuesta para que juntos publiquemos miles de artículos contra la anorexia. Esto provocará que inundemos las primeras páginas de búsquedas web y desbanquemos a las páginas sin escrúpulos creadas por gente dominada por esta enfermedad.