“No teníamos ninguna fuerza que nos uniera”

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La Asociación Colombiana de La Rioja (COLOR), con menos de un mes de vida en la Comunidad pretende dar voz a los más de tres mil colombianos que residen en la actualidad en La Rioja, además de establecer un nexo de unión con su país de origen. “La asociación surge de la necesidad de agruparnos en La Rioja”, apunta el encargado de comunicación de COLOR, Iván Caicedo, como una manera de aunar todas las voces porque “no teníamos ninguna fuerza que nos uniera”.

Después de celebrar una manifestación el pasado 4 de febrero en el Espolón logroñés contra las FARC bajo el lema No más secuestros, no más asesinatos, para llegar a un estado de paz en el país, muchos colombianos residentes en La Rioja se percataron de que necesitaban unir todas sus voces de manera formal. Así fue como se dio forma a la asociación con la celebración de la asamblea constitutiva, en la que se creó la Junta Directiva de COLOR, el pasado 29 de marzo en el Ayuntamiento de Logroño, que hoy cuenta con 150 personas inscritas.

UNIFICAR

Nace con la necesidad imperativa de unificar los intereses de la comunidad colombiana en la Comunidad, al igual que en su día lo hicieron otras asociaciones latinoamericanas. Así, trabajan ahora en proyectos culturales, deportivos y artísticos. Sobre todo Caicedo ha recalcado que están enfocados para rescatar el folclore de su país, impulsar el deporte creando varios equipos de fútbol para introducirlos en un programa de integración o identificar el nivel de paro que existe en el colectivo colombiano dentro de la Comunidad para que disminuya.

Pero no sólo pretenden impulsar estos proyectos, sino que también están trabajando en la creación de un censo de toda población colombiana que reside en la Comunidad para desarrollar la formación laboral de los miembros de la asociación con el fin de “capacitar la mano de obra” y “mejorar la cualificación de los trabajadores”. En este sentido, Caicedo ha explicado que la formación “es uno de los principales objetivos” en los que está trabajando en estos momentos COLOR. Así han creado cursos de cocina española para empleadas domésticas y hosteleras o cursos de informática básica.

También entre sus metas destacan programas para generar vínculos de identificación entre los propios colombianos y su entorno, así como ofrecer servicios de asesoría en temas jurídicos, legales, de tráfico, entre otros.

Además de todos estos proyectos, COLOR está elaborando en estos momentos “un proceso de acercamiento a los municipios riojanos”, apunta Caicedo con el objetivo de “darnos a conocer poco a poco” y conseguir un posicionamiento dentro de la Comunidad riojana.

Los socios fundadores de la Asociación COLOR son: Carlos Alberto Correa Correa, Elvia Mary Acosta, Carlos Andrés Robles Cadavid, Xiomara Hurtado Acosta, Juan David Arango Rivera, Esperanza Gómez Yepes, Elkin Abel Aristizabal Hoyos, Francisco Javier Ocampo S., Alba Luz Dulcey Parra, Luis Ruiz Santisteban, Elizabeth Rendón e Iván Darío Caicedo Pérez.

TRABAJO POR LA PAZ

Aunque por el momento Caicedo ha reconocido que no tienen contactos formales con Colombia, sí que se encuentra dentro del plan de trabajo en el que la asociación está trabajando “para contribuir al desarrollo del país”. Asimismo este tema lo están tramitando en la mesa de trabajo de COLOR con el objetivo de “desarrollar estrategias de vinculación” y poder lograr la paz, ya que se trata de “un tema fundamental” y es “nuestra responsabilidad”.

Por el momento, Caicedo ha asegurado que antes que plantear soluciones respecto a la situación que atraviesa Colombia hay que “sentar unos precedentes”. Asimismo también ha apuntado que es necesario esclarecer lo que es Colombia hoy en día, ya que “la realidad que se muestra es muy diferente” a lo que se vive allí. Por el momento, Caicedo ha señalado que “se están dando pasos hacia la estabilidad” porque por primera vez se habla de crímenes de guerra o de la violación de los Derechos Humanos, pero que todavía hay que trabajar por la paz.

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