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Rioja2 denuncia un año de ciberacoso a una de sus periodistas

Rioja2 denuncia un año de ciberacoso a una de sus periodistas

Rioja2

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Las redes han normalizado la agresividad, los insultos y la violencia verbal bajo el amparo del anonimato. Pero ¿en Internet todo vale? Una de las periodistas de Rioja2, Olivia García, lleva más de un año aguantando a un troll que se esconde tras decenas de nombres falsos y que la insulta y acosa sin miramientos. El asunto ya está en manos de la justicia.

Todo comenzó hace más de un año, cuando empezó a recibir tuits ofensivos y de mal gusto. Desde distintas cuentas, en todo este tiempo se ha dirigido a García como “periodista giliecolofemimarxista, lo cual es vomitivo y violento”, “periodista de mierda que sigue al rebaño y la línea ideológica impuesta que se necesite para ser valiente”, “no se puede ser más demagoga y más idiota”, “eres una delincuente”, “miserable hija de puta”, “¿cuál es el test que os hacen para determinar que sois lo suficiente enfermos como para empezar a recibir subvenciones?” y un largo etcétera.

De forma paralela, la página web de Rioja2 comenzó a recibir comentarios anónimos en algunas de sus noticias en la misma línea que dichos tuits: “Olivia, vete al manicomio que es donde tienen que estar los trastornados como tú”, “a ver si se le pega algo a la enferma oliaparis (su nombre en Twitter) que no hay dia que no se quede tranquila sin publicar alguna mierda feminista o giliprogre en general...pero creemos que lo suyo no tiene remedio ha entrado en metástasis victimista..”, “será recordada como un cáncer social”. “desquiciada sin vida”...

La situación tomó un cariz más grave con comentarios como éste: “Imponer la voluntad de unos a la de los demás...así se genera el odio y las guerras civiles...represión, cárceles, porrazos, tiros en la nuca (esto va dedicado a Olivia)....” y también cuando el troll pasó al plano personal y llegó a mencionar a su hija en algún tuit:

Además, tiene especial fijación con los temas relacionados con el feminismo y la orientación sexual. Sus comentarios suelen ser insultos sexistas y homófobos, siempre citando a la periodista: “Los niños no pueden ver los toros pero pueden ver desfiles de enfermos que se dan por el culo y se amputan sus órganos, pueden ver desfiles de Zombies (muertos andantes)...¿pero qué mierda es ésta? Impuestos cero, ningún servicio público ni subvención y los políticos a coger patatas...que ya sabremos nosotros gastarnos el dinero como queramos y educar a nuestros hijos...”.

“Las mujeres tienen un complejo de inferioridad y una confusión tan grande impuesta por el feminismo de Estado misógino, que quieren parecerse a los hombres hasta en follar y correrse...”

“A ver si aborto gratis ya en la sanidad pública, que los putos niños de mierda molestan, mando a mi madre a un asilo o con suerte implantan ya la eugenesia, me quito a todo el mundo de en medio y me voy a rescatar animales famélicos y luchar por sus derechos, si no tienen me los invento...”

DENUNCIA ANTE LA POLICÍA

Y no sólo molesta a la periodista, sino también a su entorno. Así, muchos de los que han retuiteado o interactuado con García en Twitter también se han encontrado con su desagradable acoso. Todos los que han sido increpados por él en las redes cuentan con un denominador común: Olivia García. Ella es el elemento común entre ellos y ella es la que recibe el mayor número de tuits, hasta 30 en cinco minutos.

Una situación insostenible que llevó a García y a algunos de los injuriados a tomar cartas en el asunto y presentar una denuncia conjunta ante la Policía Nacional el 15 de septiembre porque “persona/s desconocidas han realizado comentarios irrespetuosos, denigrantes e insultantes hacia ella y la propia página web del periódico en su apartado de comentarios, en sus propios perfiles personales, en Twitter y en Facebook, bajo varios pseudónimos, degradando la imagen de todos ellos”.

Sin embargo, parece no haber surtido efecto. Desde entonces el troll ha vuelto con diferentes identidades y con especial virulencia.

Ésta ha sido una de sus últimas “apariciones”, en la que incluso ha adjuntado una fotografía de la periodista:

El asunto ha llegado a los juzgados. Rioja2 ha decidido dar un paso más y denunciar esta situación ante la justicia. Porque no todo vale y porque no se puede consentir esta serie de mensajes amparándose en la libertad de expresión. Ni el insulto ni el acoso son libertad de expresión y las redes no deberían haberse convertido en un reducto en el que la impunidad campa a sus anchas sin ningún tipo de freno.

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