La polémica entrevista de Aznar en Antena 3 tuvo un punto fundamental en la furibunda crítica del expresidente al grupo Prisa de comunicación. Menos de una semana después, el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy participa en París en unas jornadas organizadas por Nicolas Berggruen, en la actualidad uno de los principales accionistas del grupo. El gesto de Rajoy es uno más de la lista de recomendaciones que Aznar clama a los cuatro vientos y Rajoy ignora sin buscar el cuerpo a cuerpo. Sucede, además, en un momento en donde el Grupo Prisa no es el mayor problema del Gobierno en lo que a tensiones informativas se refiere. La presencia de Rajoy en Paris ha servido también para que trascendiese que mientras Aznar le criticaba en televisión, él se reunía con el expresidente Felipe González. Aznar reconoció, en su entrevista televisiva, que solo se reunió una vez con Rajoy Brey desde que fue elegido presidente del Gobierno. Así que ambos expresidentes están empatados.