Los clásicos de cuento salen del armario

Carmina Martín es una de esas mujeres valientes que se ponen el mundo por montera y son capaces de conseguir lo que se proponen a base de tesón y saber hacer, sin importarles el qué dirán. No es de extrañar: tuvo una gran maestra, su abuela –a la que le roba el apellido a modo de homenaje–, quien a pesar de no saber leer ni escribir le contaba cuando era niña las historias más bonitas y le despertó el gusanillo de contar historias. «Ella me legó la fuerza y el coraje para atreverme con todo», confiesa.

Tras años escribiendo cuentos infantiles, poesía y novela ahora se atreve con su apuesta más arriesgada: "Cuentos Amariconados", una obra de temática LGTB de lo más especial a la que no sólo le ha puesto letra, sino que es ella misma quien edita esta obra que varias editoriales se negaron a publicar. Aunque no ha sido nada fácil encontrar la fórmula que reflejase lo que tenía en mente, por fin ha conseguido el formato ideal para que los personajes de los cuentos infantiles más clásicos se sientan cómodos y salgan del armario sin complejos.

Porque es precisamente un armario de cartón el elemento escogido para que los protagonistas de “Cuentos Amariconados” salgan literalmente del armario, cuento por cuento. Unos personajes que la escritora traslada hasta nuestros días y que sufren los problemas cotidianos de la sociedad actual.

Una vuelta de tuerca a los clásicos

Según ella misma confiesa, “Cuentos Amariconados” «surgió como muchos proyectos fluyen en este país, alrededor de unas cañas con mi marido y mi hijo, que me incitan a atreverme con hacer salir del armario a esos personajes clásicos que todos conocemos», nos explica Carmina. Con esa idea en mente, unos amigos que regentan un local de ambiente en Zaragoza (la ciudad en la que vive actualmente) le pidieron que escribriera un guión para hacer una pequeña representación para el día de San Valentín. Fue así como nació el primero de estos cuentos, Caperucita, que cuenta la historia de amor entre El Lobo y El Leñador.

La representación tuvo tanto éxito que poco a poco fue animándose a transformar otras historias de siempre en breves cuentos de temática gay y lésbica, creando nuevas historias con un claro trasfondo social, hasta completar la bandera multicolor tan característica del movimiento LGTB.

Con su libro ya bajo el brazo, en el que ha cuidado hasta detalles tan concretos como la tipografía (muy parecida a la que se puede encontrar en cualquier cartilla infantil para aprender a escribir) o la inclusión de unas láminas en las que propone al lector un divertido juego de asociación, decidió llamar a la puerta de la Librería Antonio Machado, quien se brindó a ofrecerle su local para la puesta de largo de la obra.

Poco a poco el libro fue llegando a otros espacios clave de la cultura madrileña como el Círculo de Bellas Artes, Fnac, La Central y, más recientemente, se ha dejado caer por el Café Libertad 8, con motivo de los actos del Orgullo Madrid 2014, una cita fantástica para la presentación de esta transgresora propuesta literaria LGTB.

Características del libro

Una de las cosas más llamativas de esta obra es su edición, delicadamente cuidada y con un número limitado de ejemplares, que su autora nos ha confesado no volverá a reeditar porque su objetivo es que sea un libro de edición única. Entre sus proyectos más inmediatos está lanzar una nueva serie de historias que le den continuidad a los Cuentos Amariconados y que ya ha comenzado a perfilar con El soldadito de plomo.

¿Dónde conseguirlo en Madrid?

Además de a través de la dirección de correo electrónico cuentosamariconados@gmail.com, la obra cuenta con puntos de distribución físicos en Madrid, la mayoría de ellos situados en los barrios de Chueca y Malasaña. Estos son los sitios donde podrás conseguirlo: