Corredera 20 y Escorial 16: ni hacer ni dejar hacer

Resulta inevitable acordarse del perro del hortelano al hablar de los edificios de titularidad pública que hay cerrados en Malasaña y que un día estuvieron 'okupados': Ayuntamiento y Comunidad de Madrid desalojaron Corredera Baja de San Pablo 20-Barco 39 y Escorial 16 para ponerles, sin más, un candado en la puerta.

El 14 de marzo de 2011 acabó el sueño de Proceso Corredera, el cual había comenzado apenas tres meses antes, el 5 de enero. Carpetazo a una incipiente negociación con los representantes municipales y a un proyecto serio -de 20 colectivos sociales- de convertir el inmueble en un centro social autogestionado para el barrio. Cerca de dos años después de que a instancias de la EMV -propietaria de la misma parcela sobre la que se levantan los edificios de Corredera y Barco- las fuerzas de seguridad 'desokuparan' los inmuebles, estos siguen sin uso alguno, deteriorándose y sin dar servicio a un barrio siempre necesitado de espacios dotacionales.

Mucho más reciente en el tiempo es el caso de Escorial 16: propiedad de la Comunidad de Madrid y cerrado y sin uso durante años, el edificio fue 'okupado' en noviembre de 2011 y su aventura como centro social concluyó recientemente, a pocos días de que celebraran su primer aniversario. Durante su existencia, el espacio se abrió a los vecinos, comenzó a rehabilitarse, alojó numerosos talleres, reuniones de distintos grupos y actividades culturales; ensayó -aún a muy pequeña escala- una economía de trueque y puso en marcha un comedor. Hoy, una reja impide la entrada al inmueble, para el que no se conoce plan alguno.

Con las arcas públicas vacías y las políticas de ajuste en pleno apogeo, casi cualquier proyecto de recuperación y transformación de espacios que son de todos ha quedado en el limbo, independientemente de si figuraba o no en el programa electoral de turno. Sin embargo, ni se hace ni se deja hacer.

La excepción que confirma la regla la encontramos en la calle Antonio Grilo: hoy en día, en Malasaña y en suelo municipal yermo, solo allí se está haciendo algo de provecho. El solar situado en el número 8  se encuentra 'okupado' desde junio de 2010. Colectivos ligados al Patio Maravillas fueron quienes lo 'liberaron' y, así, donde debería haberse edificado hace ya alguna que otra legislatura un centro cultural para el barrio hoy hay un huerto urbano que parece que vuelve a coger fuerza con el impulso que le están dando desde hace bien poco los miembros del Grupo de Consumo Malasaña, que han venido a sumarse a los esfuerzos de los veteranos del Jardín de las Maravillas. A pesar de que el proyecto del Solar de Grilo no ha llegado a consolidarse en ningún momento por altibajos en su gestión no es ni mucho menos una mala noticia el saber que sigue en pie.