Un estudio constata tres bloques de fuerza similar en Navarra: izquierda, derecha y nacionalismo
La Asociación Co.CiudadaNA ha editado su segundo Paper, titulado Dinámicas del Sistema Político de Navarra. Se trata de un estudio exhaustivo sobre el comportamiento electoral de Navarra en estos cuarenta años de democracia. Una de las conclusiones es que el peso de la historia y el resultado de la diversidad geográfica, lingüística y sociocultural de Navarra determinan los mapas electorales de forma consistente en el tiempo. “Por más que haya cambiado la sociedad a lo largo de estos cuarenta años, se produce una situación de bloques de fuerzas similares (izquierda-derecha-nacionalismo) y ninguno de estos ejes va a desparecer”, afirma el texto. Por eso, advierte de que la situación “va a requerir de entendimiento para desarrollar un proyecto al servicio del bien común en Navarra”.
El objetivo del estudio es entender el presente y las próximas tendencias de futuro. El texto completo, de 40 páginas, se encuentra alojado en la página de la asociación: http://www.cociudadana.es/. Una de las primeras reflexiones del documento pasa por entender cómo la sociedad navarra de los años 80 en nada tiene que ver con la actual: “Mucho más envejecida; con otras ocupaciones laborales; otras pautas sociales y culturales. En definitiva, son otras las políticas públicas que Navarra necesita y que tardan en acometerse”.
La Navarra de los tres tercios tiene su origen en dos factores: uno geográfico y otro demográfico. El geográfico configura tres zonas muy diferenciadas: el noroeste, la comarca de Pamplona y la Ribera. En el aspecto demográfico, constata la pérdida de interés de las generaciones más jóvenes en el discurso de los dos grandes partidos nacionales.
El nuevo paper hace referencia también a la emergencia de los nuevos partidos, cada vez más consolidados en el espacio político: “Estamos ante un escenario político nuevo. La diferencia estriba en la separación entre vieja y nueva política. El bipartidismo puede darse por acabado. Las diferencias entre vieja política y nueva política se plasman de manera generacional. Se puede decir que cada generación vota de manera diferente”.
Incapacidad para buscar acuerdos
En cuanto a los puntos de mejora, el estudio afirma que el actual sistema político “muestra su incapacidad para buscar acuerdos y encontrar los puntos de entendimiento. No han buscado grandes acuerdos para regenerar el sistema democrático en el que se ha abierto una vía de agua en la confianza hacia las instituciones democráticas”, denuncia.
Para remediarlo “se necesita coraje político. También voluntad de pacto que permita el acuerdo entre quienes defienden propuestas diferentes y aun encontradas, pero se reconocen como adversarios, no como enemigos. Se necesita estar dispuestos a llegar a los acuerdos que permitan mejorar la sociedad y exigir responsabilidades a los partidos y a sus dirigentes”, defiende el texto.
La publicación recuerda que, ante la actual pugna política en torno al llamado Régimen del 78, el referéndum para la reforma política contó con el apoyo de más de nueve de cada diez electores en Navarra. También cómo la constitución española se aprobó con las tres cuartas partes de los votos válidos de los navarros y navarras. “La transición española no puede calificarse como pacífica, por la frecuencia de la actividad terrorista. Por todo ello, en estos momentos, en que se denuesta la Transición hay que recordar el esfuerzo cívico de muchos ciudadanos y ciudadanas por la misma y su radical base democrática”.
Del texto constitucional resultante “ningún partido pudo decir que fue una obra exclusivamente suya, pero todos ellos, como consecuencia del acuerdo, la transacción y la cesión, habían llegado a un punto de encuentro final, plasmado en la redacción suficientemente satisfactoria para todos, que se sometió a la votación de los representantes de la soberanía popular”.
Un espíritu que el paper reivindica: “Debe inspirar los intentos de próximas reformas constitucionales”. La cuestión de la incorporación de Navarra a Euskadi, también se resolvió con un acuerdo entre partidos nacionalistas y no nacionalistas.
