Has elegido la edición de . Verás las noticias de esta portada en el módulo de ediciones locales de la home de elDiario.es.
La portada de mañana
Acceder
La izquierda presiona para que Pedro Sánchez no dimita
Illa ganaría con holgura y el independentismo perdería la mayoría absoluta
Opinión - Sánchez no puede más, nosotros tampoco. Por Pedro Almodóvar
Sobre este blog

Viento del Norte es el contenedor de opinión de elDiario.es/Euskadi. En este espacio caben las opiniones y noticias de todos los ángulos y prismas de una sociedad compleja e interesante. Opinión, bien diferenciada de la información, para conocer las claves de un presente que está en continuo cambio.

Requisitos

El secretario general del PP, Teodoro García Egea, durante una manifestación en Madrid

Gonzalo Bolland

0

Los hombres y las mujeres que tienen la política como profesión suelen comentar que su trabajo es lo más parecido a un veneno del que no conocen antídoto alguno. Con honrosas excepciones sabido es que no hay profesional de la política que haya abandonado su oficio cuando la tarea que habitualmente desarrolla le procura poder, dinero, posición, influencia o reconocimiento social. Tal vez por esto o tal vez porque hay vocaciones que las fomenta el diablo o, quien sabe, tal vez porque las generaciones se suceden para cometer los mismos o parecidos errores, hay estudiantes en nuestros días, jóvenes con la ambición propia de quienes aún creen que el tiempo está de su parte, que puestos a hacerse preguntas llegan a preguntarse cuáles son las cualidades necesarias para convertirse en diputado, ministro, alcalde, presidente del gobierno o incluso virrey de alguna comunidad autónoma.

Tras muchos años dedicado a este insólito oficio de observar los modos y maneras de la gente para no obtener más beneficio que la pobreza y la perplejidad, tengo comprobado que para ejercer la política en este desmemoriado país, conviene, en primer lugar, no saber nada de nada ya que desdeñamos a quien sabe más que nosotros dado que en esta época la sabiduría del prójimo no la admiramos sino que la consideramos un agravio personal, cuando no una humillación.

Se ha de procurar, después, no decir nunca la verdad ya que no queremos conocer la verdad sino declaraciones que confirmen nuestros prejuicios o apoyen nuestras ideas. Luego se ha de tener el discurso desdeñoso, el gesto huraño, la expresión avinagrada, el ceño permanentemente fruncido, como si se llevara años, siglos, civilizaciones casi enteras sin evacuar bien del vientre y por último, tras pasarse el día soltando broncas a diestro y siniestro se ha de procurar exponer unas cuantas obviedades a través de la televisión como si se estuviera descubriendo una nueva formula matemática, una antiquísima receta culinaria o la relación de unos ingredientes farmacéuticos que combaten eficazmente el desaliento.

Hubo un tiempo, lejano ya, muy anterior a la abrumadora presencia de los medios de comunicación en nuestra rutina diaria, en que los políticos de nuestro país parecían personas más o menos normales; muy parecidas a cualquier otro ciudadano. O sea, eran hombres y mujeres que de cuando en cuando sonreían, soltaban chistes, caminaban por las calles con el cordón de un zapato suelto, dudaban de sí mismos, se detenían ante un escaparate para mirar grifos de baño, visitaban balnearios para curarse la melancolía y se mostraban en público sin necesidad alguna de disimular sus torpezas, su buen humor o sus debilidades.

Pero ahora quién no se comporte como un predicador televisivo, lleno de ruido y naderías, y no sea capaz de difundir el relato ficticio que convezca a más ciudadanos, - ya sea el comunismo, el nacionalismo, la necesidad de construir un muro para detener una invasión migratoria o la conveniencia de vestir chandals a lo Rosalía para reivindicar el nuevo feminismo -, parece ser que no tiene el más mínimo futuro como dirigente de nuestra gigantesca administración pública.

Sobre este blog

Viento del Norte es el contenedor de opinión de elDiario.es/Euskadi. En este espacio caben las opiniones y noticias de todos los ángulos y prismas de una sociedad compleja e interesante. Opinión, bien diferenciada de la información, para conocer las claves de un presente que está en continuo cambio.

Etiquetas
stats