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¿Matadlos o rematadlos?

Elena Nieva

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Díaz Ayuso está contenta. A poco más de dos meses de los próximos comicios autonómicos recibe lo que ella considera varios espaldarazos a su candidatura: el cierre de la huelga de médicos de Primaria, el archivo por parte de la Fiscalía Europea sobre el cobro de comisiones de su hermano, el anuncio de aumento de indemnizaciones para los afectados por la línea 7B de Metro y, para colmo, la noticia de que el marido de Mónica García también ha cobrado el bono energético. Y es que todo depende de cómo se mire.

Según la presidenta, la desconvocatoria de la huelga es “un gran motivo de satisfacción. ... Este es un paso más en la mejora de la Atención Primaria”. Sin embargo a mí me parece que, después de casi cuatro meses de huelga, para llegar a las elecciones autonómicas con ese frente cerrado la Consejería no ha tenido más remedio que ceder a las reivindicaciones de los médicos en un acuerdo cuya ejecución está aún por cumplir y que podría haberse alcanzado al principio. No haberlo hecho antes ha causado grandes perjuicios especialmente a los pacientes. Y no mejora la Atención Primaria, sólo restablece una parte de lo que poco a poco se ha ido destruyendo. Lejos de ser una batalla ganada no es más que un retraso pernicioso y una claudicación interesada, una derrota en toda regla. Ahora quedan por solucionar, entre otros problemas del ámbito sanitario, la pretensión de asignar funciones médicas a los enfermeros, la teleatención médica, la desastrosa organización de las urgencias extrahospitalarias, la cobertura de puestos de trabajo estructurales mediante horas extra, las enormes listas de espera reiteradamente denunciadas como maquilladas y manipuladas, la constante y abundante derivación de fondos a la sanidad privada, los contratos “urgentes” del Zendal y su plantilla de quita y pon... Total nada.

En cuanto a su hermano, independientemente de que se archive lo que se archive, es un hecho reconocido por ella misma que cobró unas muy sustanciosas comisiones de la Comunidad de Madrid durante lo más crudo de la pandemia. Que sean legales o no es irrelevante en cuanto a ética se refiere. Pero ella lo celebra y con razón, es un alivio que no empapelen a su hermano y que ella no se vea salpicada.

Lo de la línea 7B de Metro es sangrante. Un problema que arrastra desde 2004 con Esperanza Aguirre a la cabeza, familias enteras arruinadas económica y moralmente, responsabilidad de la Comunidad de Madrid ratificada por informes y tribunales. Y Díaz Ayuso se descuelga con un anuncio, que ya veremos si cumple y en qué forma, de una pequeña ampliación en la indemnización de los afectados, a dos meses de los próximos comicios. Después de casi veinte años, ahora tiene prisa la presidenta por anunciar ‒que no materializar‒, supuestas compensaciones por el descomunal perjuicio causado a cientos de familias. Prometer no está prohibido. Espero que tanto los afectados como quienes siguen este asunto no se dejen dar gato por liebre en las próximas elecciones.

Y para terminar, su mano derecha Ossorio ha cobrado los bonos sociales eléctrico y térmico, ayudas dirigidas a personas vulnerables. Para Ossorio suponen 195,82 euros anuales y un descuento del 65% en la factura de la luz. Yo me pregunto qué lleva a un individuo con los ingresos y patrimonio del señor Ossorio a solicitar esa ayuda. Y no sólo lo admite, sino que está orgulloso de ello porque tiene derecho, es legal. No importa, la Comunidad de Madrid ha encontrado el antídoto a posibles críticas: como el marido de Mónica García también lo cobra, centra el problema en García y Ossorio desaparece. Todo arreglado. Y es que a mi modo de ver el problema no reside en los protagonistas, sino en la ley, en que la ley lo permita. Hace muchos, muchos años, un adinerado parlamentario de la derecha francesa defendía que su declaración de la renta en negativo era absolutamente legal. La oposición le contestó: “Precisamente eso es lo malo”.

Como consecuencia de todo esto, Díaz Ayuso se ve fuerte y ordena a sus huestes: “La izquierda está acabada ... Matadlos”. Hubiese quedado mejor si hubiese dicho 'Rematadlos', ¿no? Menos agresivo y más apropiado a la situación, porque matar lo que ya está acabado no tiene sentido. Seguramente el subconsciente le ha traicionado.

Díaz Ayuso está contenta. A poco más de dos meses de los próximos comicios autonómicos recibe lo que ella considera varios espaldarazos a su candidatura: el cierre de la huelga de médicos de Primaria, el archivo por parte de la Fiscalía Europea sobre el cobro de comisiones de su hermano, el anuncio de aumento de indemnizaciones para los afectados por la línea 7B de Metro y, para colmo, la noticia de que el marido de Mónica García también ha cobrado el bono energético. Y es que todo depende de cómo se mire.

Según la presidenta, la desconvocatoria de la huelga es “un gran motivo de satisfacción. ... Este es un paso más en la mejora de la Atención Primaria”. Sin embargo a mí me parece que, después de casi cuatro meses de huelga, para llegar a las elecciones autonómicas con ese frente cerrado la Consejería no ha tenido más remedio que ceder a las reivindicaciones de los médicos en un acuerdo cuya ejecución está aún por cumplir y que podría haberse alcanzado al principio. No haberlo hecho antes ha causado grandes perjuicios especialmente a los pacientes. Y no mejora la Atención Primaria, sólo restablece una parte de lo que poco a poco se ha ido destruyendo. Lejos de ser una batalla ganada no es más que un retraso pernicioso y una claudicación interesada, una derrota en toda regla. Ahora quedan por solucionar, entre otros problemas del ámbito sanitario, la pretensión de asignar funciones médicas a los enfermeros, la teleatención médica, la desastrosa organización de las urgencias extrahospitalarias, la cobertura de puestos de trabajo estructurales mediante horas extra, las enormes listas de espera reiteradamente denunciadas como maquilladas y manipuladas, la constante y abundante derivación de fondos a la sanidad privada, los contratos “urgentes” del Zendal y su plantilla de quita y pon... Total nada.