Un nuevo mapa mediático y político

En el mapa político nunca se encuentra Andalucía. Cuando se tiene que decidir sobre cuestiones territoriales, sólo las exigencias catalanas, vascas, valencianas e incluso las gallegas se tienen en cuenta. En el Congreso sólo Catalunya, Euskadi, Galiza y València tienen partidos que les representan. Y eso se nota. Y esto ya cansa.

Pero esta cuestión no se puede analizar sólo desde el prisma de los partidos, sino que se debe tener en cuenta qué medios de comunicación tenemos. En las terras catalanas son varias las radios, las teles y los periódicos, incluidos los medios públicos, que dan la batalla porque lo catalán se tenga en cuenta en la política estatal. Lo mismo en Euskadi. Pero ¿Y en el resto?

En Andalucía los medios de comunicación más importantes como el Diario SUR forman parte de grupos mediáticos estatales, en este caso Vocento (el del ABC), con pocos intereses en reivindicar lo andaluz. Los medios públicos sólo lo hacen cuando el que gobierna la Junta no gobierna el Estado y se hace para presionar al otro partido. Y esto debe cambiar.

Desde hace años tenemos claro que los territorios periféricos van a tener la llave política. No sólo los partidos independentistas de Catalunya o Euskadi, sino también las movilizaciones de la España vaciada y de los territorios que han sido relegados históricamente por los gobiernos de España a un tercer plano, como Andalucía, Extremadura, Murcia, las islas etc. En estas regiones se están planteando una serie de desafíos a la forma tradicional de gobernar que, probablemente, lo cambien todo.

Estos desafíos políticos deben ir acompañados de otros desafíos, especialmente en el plano comunicativo. Desde la izquierda mediática se deben tener en cuenta las peculiaridades territoriales y las necesidades que algunas regiones tienen por el olvido sistemático de ellas (podemos hablar de las comunicaciones en Extremadura o de los servicios sociales en la España vaciada).

Cada vez somos más los que alzamos la voz en este asunto. En el ámbito comunicativo, en Andalucía hay varios medios de comunicación humildes que reivindican lo andaluz y dan la batalla cultural en ese asunto como En Andaluz o La Nueva AndaluZía.

En este nuevo paradigma político, en el que las regiones olvidadas van a tener más peso en las decisiones políticas, es necesario que los periodistas estemos (habla un estudiante de Periodismo malagueño) a la altura y acompañemos al cambio social y político en el que nos sumergimos. Recordemos que es desde los medios desde donde más se puede ayudar a avanzar y, por eso mismo, debemos estar a la altura.