Casany y su Seguridad Social. Cómo convertir la energía en música y viceversa

Los periodistas se lo advertimos ayer a José Manuel Casany. “No lo vas a conseguir”, le dijimos al cantante de Seguridad Social cuando nos apuntó su intención de cantar sentado durante el concierto -versión cumpleaños- que su banda ha ofrecido esta noche en Alicante con motivo del 30 aniversario del grupo.

¿Qué cantante podría dejar reposar su trasero sobre una banqueta en medio de un escenario cuando tu grupo es adrenalina, tu público aplaude y canta, y en la fiesta del cumpleaños de la banda aparecen Raimundo Amador, Carlos Segarra y Carlos Tarque, entre otros?.

Quién sabe si lo habrá, pero desde luego Casany no. A la tercera canción se ha levantado del taburete y con él todo el público que esta noche ha querido asistir al concierto del aniversario de Seguridad Social (1983-2013) en el Auditorio Provincial de Alicante.

Un concierto que se ha grabado en audio y vídeo, y que junto al trabajo de estudio que el grupo realizará próximamente con más amigos, como Bunbury, Antonio Carmona y Estopa, conformarán la próxima entrega de la banda a sus seguidores y simpatizantes.

Y ha sido este trabajo de grabación en directo lo que ha impedido en cierta forma que el concierto tuviera continuidad, pues varias canciones han tenido que ser repetidas por la banda y sus invitados -sarna con gusto no pica-, y en algunos momentos ha habido parones musicales que Casany ha resuelto con absoluta maestría.

Escuchar dos veces “Chiquilla”, una de las míticas canciones del grupo y que forma parte ya de la historia de este país, con el punteo a la guitarra de Raimundo Amador ha sido un regalazo para los asistentes.

¡Qué curioso!... el público ha acudido a un cumpleaños y le han obsequiado con fantásticos regalos para los oídos y los recuerdos.

“Es el sueño de mi vida y todo lo que soy, y todo lo que tengo lo voy a dar esta noche aquí”, afirmaba Casany al inicio del concierto.

Y lo ha dado, vaya que si lo ha dado.

El alma de esta Seguridad Social ha tenido que respirar ante una crecida de sentimiento que le ha disuelto la voz en una ocasión, se ha llevado la mano al corazón varias veces para expresar el afecto por su público y se ha fundido en abrazos con sus amigos, con quienes ha compartido escenario y canciones.

Si Carlos Segarra (Los Rebeldes) metía el sonido eléctrico de su guitarra y su característica voz en “Acción”, el cantante de M Clan, Carlos Tarque, ha acompañado al grupo en “No verte más”.

Si el eterno nervio y la genuina voz que siempre ha ofrecido Javier Ojeda (Danza Invisible) quedaba patente en “Sólo tú” y Raúl Pulido ponía el quiebro aflamencado en “Condenado a vivir”, la calidez de Soledad Giménez (Presuntos Implicados) llegaba junto a Casany en la versión que ya realizara Seguridad Social de un clásico de Nino Bravo, “Un beso y una flor”.

Se le ha visto feliz a Casany y el público lo ha notado. Este último ha cantado y tarareado todos los temas interpretados por la banda, desde el movido “Comerranas” al genuino “1,2,3 .. mueve los pies”; del canto de “El viajero” a “La rumba tarumba”.

Si fueran pocas la sorpresas para los invitados -el público-, Casany y su grupo -percusión, una guitarra y un bajo- han ofrecido un tema, titulado “Me siento mucho mejor”, que adaptó el argentino “Charly García de una canción del grupo The Byrds. Una delicia.

A cambio, quienes esta noche ocupaban los asientos del auditorio alicantino han regalado aplausos, frases enteras de canciones y movimientos de manos y pies.

Al público sólo le ha faltado corear “Feliz Cumpleaños”. Quién sabe si lo ha aplazado para el 40 aniversario o, simplemente, de haberla cantado hubiera roto una sintonía magnífica e histórica que ha superado las tres horas.

Decía también Casany antes de este concierto que “para el cumpleaños hacía falta algo más: vernos las caras, escucharnos más de cerca y sentirnos”, que quería estar “con amigos y entre amigos”.

Casany, amigo, lo has logrado y de largo.

Alberto Santacruz