Jaua dice que Celac y Unasur activarán mecanismo de solidaridad con Venezuela

El canciller venezolano, Elías Jaua, dijo hoy que organismos regionales como la Celac, la Unasur y el ALBA activarán “mecanismos de solidaridad” con su país en rechazo a los incidentes registrados ayer tras una jornada de marchas en contra del Gobierno de Nicolás Maduro.

“Los cancilleres que se han comunicado con nosotros nos han manifestado que a iniciativa de muchos, estos países van a promover en el marco de la Celac, de Unasur, del Alba, se activen los mecanismos de solidaridad y los pronunciamientos necesarios para condenar los hechos de violencia”, señaló Jaua al canal Telesur.

El canciller agradeció las llamadas de solidaridad que dijo haber recibido de otros gobiernos de América Latina, como Ecuador, Argentina, Brasil, Nicaragua y Cuba, tras reiterar que hay en marcha un plan financiado desde el exterior para sumir a Venezuela en un espiral de violencia.

Según Jaua, con los llamamientos a protestar contra el Gobierno la oposición venezolana buscaba “el pronunciamiento de algún sector militar que frente al caos que se intentaba generar decidiera actuar para poner orden a la situación”.

Frente a ello, señaló, su Gobierno va tomar “las medidas de autoridad democrática que haya que tomar”.

“Ya no podemos tolerar más que este grupo siga actuando impunemente, bañando de sangre al pueblo venezolano”, afirmó.

“Vamos a garantizar la paz pero sin impunidad (...), estamos obligados a hacer justicia”, agregó.

Jaua arremetió especialmente contra el dirigente opositor y promotor de las marchas de ayer, Leopoldo López, al acusarlo de ser el “responsable intelectual y político” de la muerte de tres personas registrada en Caracas al término de las protestas.

Una jornada de protestas en Caracas convocada y desarrollada de forma pacífica contra la situación económica, la política de Maduro y recientes detenciones de estudiantes por altercados en el oeste del país degeneró ayer en enfrentamientos violentos que acabaron con la vida de esas personas y más de 60 heridos de gravedad.

El Gobierno de Maduro denunció un “rebrote nazifascista”, mientras que sus adversarios le acusaron de suspender las garantías constitucionales por anunciar que todo aquel que marche sin permiso de las autoridades será inmediatamente detenido.