Rivera: No hay mejor política social que bajar los impuestos a los más desfavorecidos

El presidente de Ciudadanos, Albert Rivera, ha defendido que no hay mejor política social que bajar los impuestos a quienes menos tienen, cargando contra Mariano Rajoy y José Luis Rodríguez Zapatero por pasarse prácticamente una década “machacando” a la clase media y trabajadora.

Y lo ha hecho después de anunciar ayer un acuerdo con el Gobierno, a cambio de su apoyo al techo de gasto de 2018, para que los “mileuristas” estén exentos del pago del IRPF y otras deducciones para contribuyentes con el cónyuge discapacitado, tener a cargo una persona mayor o a partir del cuarto hijo.

Rivera, que ha inaugurado la escuela de verano que Ciudadanos ha organizado en el Colegio Oficial de Arquitectos de Madrid y que lleva el lema “Liberalismo es Progreso”, ha puesto en valor este acuerdo del que se beneficiarán 3,5 millones de familias en 2018.

Familias, ha dicho, que tendrán “más dinero en el bolsillo” porque se les habrá quitado “piedras de la mochila” y cuando eso es así -ha subrayado- se genera más riqueza porque la economía se mueve.

Por eso Cs, ha argumentado el líder de la formación naranja, no se va a parar ahí y seguirá peleando para que en 2019 haya bajadas de impuestos “para el resto de los españoles”.

“Tenemos que tener una economía de mercado que sea capaz de repartir esa riqueza. No hay ninguna democracia fuerte sin una clase media fuerte”, ha dicho.

Albert Rivera ha puesto en valor la estrategia política de su formación, aportando “estabilidad” a la legislatura y negociando con el Gobierno cambios y reformas, recordando también otras iniciativas de su partido como la ley de autónomos, el complemento salarial para jóvenes o el permiso de paternidad, asumidas por el Ejecutivo en estos meses.

Si no llega a ser por Ciudadanos “este país estaría bloqueado”, ha recalcado Rivera, que ha señalado que su partido tiene ahora el reto de ofrecer una alternativa para gobernar España desde ese proyecto liberal que representa “el progreso”, frente al populismo -ha señalado- que es “retroceso”.