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Álvarez de Toledo deja en el aire su continuidad en el Congreso y critica la “labor de zapa” de Génova

Cayetana Álvarez de Toledo durante su rueda de prensa a las puertas del Congreso de los Diputados, después de que el presidente del PP, Pablo Casado, le comunicara su destitución.

elDiario.es / Europa Press

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La que fuera portavoz del Partido Popular en el Congreso de los Diputados hasta la semana pasada, Cayetana Álvarez de Toledo, ha dejado en el aire su continuidad en la Cámara al tiempo que ha criticado la “labor de zapa permanente” a su acción política con la que se ha encontrado en el seno de su partido. En unas declaraciones a la Cadena COPE, la antigua mano derecha de Pablo Casado no ha querido especificar cuál será su próxima decisión, aunque ha declarado estar comprometida con “los 280.000 catalanes que votaron por el PP en las elecciones generales”, pese a las trabas que ha podido experimentar en su cargo.

“Desde el minuto uno hubo personas que no solo criticaron mi nombramiento, sino que trataron de limitar mi acción política a la mínima expresión”, ha admitido Álvarez de Toledo antes de asegurar que daba “por hecho el ataque de la izquierda y del nacionalismo”, pero no anticipaba que dentro del partido “sucediera eso”.

A estos comentarios ha respondido este martes José Luis Martínez-Almeida, quien ha subrayado que el país está en un momento “crítico” en el que se requiere “mirar adelante en vez de al pasado” y centrarse en los españoles en lugar de los aspectos internos. “Creo que no le hacemos ningún favor a los españoles”, ha remachado en referencia al cese de Álvarez de Toledo

Para la antigua portavoz, España se encuentra en un momento decisivo, y le “preocupa” que tenga esa visión porque “la sociedad está cincelada por la superioridad moral de la izquierda y el nacionalismo” y por tanto se debe “cambiar esta sociedad para hacerla más libre y más igual”. “Moralmente es obligatorio”, ha apuntado para luego criticar a Casado apuntando que su gestión “es una forma de desistimiento” porque “renuncia a gobernar salvo que la izquierda lo haga rematadamente mal”.

“En caso de que llegaras a gobernar, que puede ser, no vas a evitar la contestación de quien sigue gozando de la hegemonía ideológica y política a pesar de estar en la oposición”, ha añadido.

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