El portavoz de ERC, Joan Tardá, pide que “todos los cargos imputados dejen sus cargos, se llamen Pujol, Blanco o sean del partido que sean”
El portavoz de ERC Joan Tardá, abogó este martes, durante un debate sobre la corrupción presentado en el pleno por la Izquierda Plural, por que “todos cargos electos imputados abandonen los cargos, se llamen como se llamen, Pujol, Blanco o sean del PP”. Su petición llega justo horas después de conocerse la imputación de Oriol Pujol por la 'trama de las ITV', que ha llevado al dirigente de Convèrgencia a renunciar 'temporalmente' de sus cargos orgánicos pero no a dimitir como diputado autonómico. Mientras Tardá pronunciaba estas palabras desde el hemiciclo, su formación evitaba en un sonoro silencio pedir la dimisión de Oriol Pujol.
El portavoz de ERC comenzó su intervención asegurando que “la gravedad del momento” exigiría que “todos los cargos electos imputados abandonaran los cargos se llamen como se llamen” pero añadiendo que de igual manera deberían ser “reparados” si después de ser juzgados “no hay condena”.
Además, reclamó a la Justicia “investigaciones rápidas y concretas” y puso el dedo en la llaga sobre otro asunto de financiación ilegal que afecta a la otra parte de la coalición nacionalista catalana, Unió Democrática. “No puede ser que el caso Pallerols haya tardado 13 años en resolverse”, afirmó el portavoz de ERC – cuyo partido apoya al Govern de CiU en Cataluña-, mientras rechazaba que en el futuro puedan darse acuerdos como el que ha habido entre la fiscalía y los acusados del caso Pallerols para intentar evitar el ingreso en prisión de varios acusados. Tardá abogó también por que los corruptos “devuelvan lo robado aunque estén hipotecados de por vida” y en el caso de que no puedan, sean los partidos a los que pertenezcan quienes lo hagan “de forma subsidaria”. “Los partidos políticos tienen que ser los que den ejemplo. Es nuestro deber como representantes públicos”, dijo Tardá.
Momentos antes, Cayo Lara, en su intervención en defensa de la proposición de ley de la Izquierda Plural, había planteado la necesidad de reformar con urgencia el Código Penal para aumentar las penas por corrupción, pero también varias leyes para propiciar los controles y la transparencia, como la Ley del Suelo; la Ley de Enjuiciamiento Criminal; la Ley de Contratos del Sector Público; la que regula los conflictos de intereses de los miembros del Gobierno y altos cargos de la Administración General del Estado; la Ley de Bases de Régimen Local; la del Poder Judicial y la de Financiación de Partidos.
Lara criticó al ministro de Cultura, José Ignacio Wert, por decir que “hay una percepción social exagerada sobre la corrupción”. “¿Pero, en que mundo vive este ministro?”, se preguntó, destacando que precisamente la corrupción es la segunda preocupación de la ciudadanía, como demuestran las encuestas.
El representante de CiU, Feliu Guillaumes, no contestó a Tardá y se limitó a respaldar algunas de las reformas planteadas por Lara porque, como dijo, “no podemos negar que existe alarma social” ante los numerosos casos de corrupción. Habló de la necesidad de “purificación” y de “purgación” de los responsables públicos que caigan en esas prácticas y sentenció que “el estado español se ha de sumir en una catarsis”, invitando al resto de los partidos a trabajar en ese sentido.
En nombre del PP, Arturo García Tizón, se centró en recordar las medidas incluidas en la resolución aprobada por el Congreso en el debate de Estado de la Nación, que rechazó precisamente la Izquierda Plural y también el PSOE. Un rechazo que le sirvió de argumento al portavoz del PP para no apoyar las medidas defendidas por el portavoz de IU al que acusó de “intentar buscar un titular” con una propuesta “oportunista, poco rigurosa y falta de consistencia”, y no el consenso de los grupos para buscar salidas a la corrupción.