La prórroga de los subsidios de desempleo en EE.UU. se estanca en el Senado

La prórroga de los subsidios para los desempleados de larga duración en EE.UU., que expiraron a finales de diciembre y benefician a 1,3 millones de personas, se estancó hoy en el Senado, que no retomará las negociaciones sobre esta ley hasta que vuelva de su receso a finales de mes.

Tras semanas de negociaciones, el Senado rechazó hoy dos propuestas, una demócrata y una republicana, para la prórroga de estas ayudas, que quedan por tanto en el aire al menos hasta el 27 de enero, cuando el Senado retoma su actividad.

En un comunicado posterior a la votación, la Casa Blanca acusó a los legisladores republicanos de “bloquear” la solución para prorrogar los subsidios de desempleo de larga duración a 1,3 millones de estadounidenses, una medida clave “no sólo para esos ciudadanos, sino también para la economía del país”.

“Continuaremos trabajando con ambos partidos para encontrar una solución, porque el coste de la inacción es demasiado alto para los estadounidenses que luchan cada día por encontrar un trabajo”, afirmó el portavoz de la Casa Blanca, Jay Carney.

La prórroga de los subsidios de desempleo es una prioridad para la Administración de Barack Obama, quien hoy mismo, en su primera reunión de gabinete del año, enfatizó que es importante que los legisladores “hagan algo” pronto para aliviar la situación económica de los 1,3 millones de estadounidenses afectados.

La discusión entre republicanos y demócratas en el Congreso sobre los subsidios pivota en torno a dos aspectos: la duración de la prórroga y, lo que es más importante, el coste que esta supondría para las arcas públicas.

Los pagos del seguro por desempleo expiraron al final del año pasado porque la oposición republicana se negó a renovarlos, con el argumento de que el programa tenía naturaleza temporal y, además, su extensión, aseguran, disuade a quienes están en paro de buscar activamente un nuevo puesto laboral.

Asimismo,los legisladores republicanos son reticentes a una nueva prórroga de estas ayudas, que tienen una dotación media de 1.166 dólares mensuales, porque, a su juicio, aumentaría el déficit federal, a no ser que éste se compensara con recortes de gastos en otras partidas presupuestarias.

El programa de compensación por desempleo de emergencia comenzó durante la presidencia de George W. Bush en 2008 y, hasta el pasado diciembre, se había renovado cada año.

Cuando se lanzó este programa de ayudas, el paro en Estados Unidos era del 5,6 por ciento y la duración media del periodo de desempleo no sobrepasaba las 17 semanas.

Ahora, el desempleo es el mayor reto de la economía del país, puesto que, a pesar de que Estados Unidos comienza a remontar tras una larga recesión, la tasa de paro es al 6,7 % y la duración media del periodo sin trabajo es de 36 semanas.