El Govern balear ha prohibido a sus ciudadanos viajar desde este viernes y hasta el 12 de abril a la Península, salvo por motivos profesionales o fuerza mayor como ir al médico, y vuelve a cerrar en Mallorca el interior de sus bares y restaurantes para evitar una cuarta ola de COVID-19. Sin embargo, sí permitirá a los residentes moverse dentro del archipiélago, aunque ha barajado seriamente el cierre perimetral de cada isla.
El Ejecutivo autonómico ha anunciado esta tarde más restricciones para evitar un repunte de los contagios, a pesar de que la incidencia acumulada de la COVID-19 en Baleares es la segunda menor de España con 47 casos por 100.000 habitantes en 14 días. Sin embargo, los epidemiólogos prevén que se rebasará en pocos días y opinan que se deben restringir al máximo los movimientos de la población ante las próximas vacaciones de Pascua.
Informa EFE.