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Sobre este blog

UNRWA es la Agencia de Naciones Unidas para la población refugiada de Palestina en Oriente Medio. Desde 1949 trabajamos para proporcionar asistencia, protección y defensa a más de 5 millones de refugiados y refugiadas de Palestina, que representan más de la quinta parte de los refugiados del mundo y que actualmente viven en campamentos de refugiados en Jordania, Líbano, Siria y el territorio Palestino ocupado (la franja de Gaza y Cisjordania), a la espera de una solución pacífica y duradera a su difícil situación.

Palestina, Siria, Ucrania: la vida de Marsel, hijo de guerras

Marsel de pequeño

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Marsel tiene raíces en tres países, Palestina, Siria y Ucrania. Durante tres generaciones, su familia ha estado huyendo de las guerras. Su última parada: París. 

Como muchos sirios, Marsel llegó en 2016 a Francia cinco años después de que comenzara la guerra. Llegó en avión, directo desde Líbano, gracias a su pasaporte ucraniano. “Mi familia viene de tres países diferentes y hoy en día no puedo vivir en ninguno de ellos”. Hace unas semanas, su madre, Ludmila, pudo salir de Ucrania para reunirse con él en París. 

Con su enorme sonrisa y sus ojos chispeantes, Marsel asegura que tuvo una infancia maravillosa y hoy tiene una vida plena en la treintena. Sin embargo, su historia es una versión condensada de conflictos que se suceden desde hace casi un siglo. 

De Palestina a Siria  

En 1948, con la creación del Estado de Israel, Mohamed Zaki Abdo, abuelo de Marsel, un próspero comerciante de Yafa, salió de Palestina para refugiarse en Damasco, Siria. La familia, aunque desarraigada, estaba bien, vivían en un apartamento grande en el centro de Damasco. Mohammed Zaki crió a sus hijos en Damasco, con la idea de que pronto regresarían a su país, Palestina. Mientras tanto, invirtió en la educación de sus hijos. Su hijo Nabil, el padre de Marsel, estudió un doctorado en ingeniería mecánica en Luhansk, Donbass, Ucrania. Allí conoció a Ludmila Leonova, también estudiante de ingeniería mecánica. 

En 1988, después de sus estudios, Nabil, de raíces palestinas y sirias, y Ludmila, de Ucrania, se fueron a vivir a Damasco. Pero la familia no aceptó la relación y los dos amantes tuvieron que mudarse a Yarmouk, el distrito de refugiados y refugiadas de Palestina, un distrito mucho más pobre. Marsel es el segundo hijo de Nabil y Ludmila. Nació en 1992. “Solo tengo recuerdos felices de mi infancia. Mi hermano mayor y yo éramos niños mimados. Nos mudábamos mucho. Mi padre era profesor en la universidad y mi madre decidió dedicarse a nosotros y daba clases de piano”. 

En las escuelas de Naciones Unidas  

“Pasé toda mi infancia en las escuelas de UNRWA, la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados y Refugiadas de Palestina. Fui a varias de ellas. En ese momento, eran las mejores escuelas de Damasco. Teníamos varias salas, laboratorios de química, talleres de dibujo y sobre todo maestros palestinos totalmente dedicados a su trabajo. Los sirios envidiaban nuestras escuelas y les hubiera gustado poner allí a sus hijos”, recuerda Marsel. 

De niño, Marsel aprendió a tocar el piano y la guitarra, tocaba en una compañía y solía ir al teatro con sus padres. Practicó teatro y danza clásica durante 9 años y se convirtió en actor infantil. Entre los 8 y 16 años, apareció en 25 anuncios de la televisión siria y actuó en una serie educativa que se retransmitía en todo Oriente Próximo. Después de bachillerato, comenzó a estudiar arquitectura. Siete años después, en la universidad, se graduó entre el top 10 del país. 

La guerra en Siria 

Pero la guerra en Siria estalló en 2011. “Nuestro barrio de Damasco fue el primero de la capital en ser atacado. Tuvimos que dejar nuestro apartamento e ir a la casa de mi tía. Continué mis estudios, pero mi padre comenzó con los primeros síntomas de Alzheimer”. 

Un padre enfermo, una guerra y poca esperanza para el futuro.  “La guerra otra vez… huir otra vez… Decidimos que papá y mamá se mudarían a Ucrania. Aunque papá nunca había querido solicitar la ciudadanía ucraniana porque siempre había soñado con regresar a Palestina. No fue fácil. Papá, en ese momento, estaba muy impedido por el Alzheimer. No podía hacer nada por sí mismo. No podía lavarse, comer o hacer las cosas más simples, así que pasó por un infierno en ese viaje. Pero finalmente llegaron a Bila Tserkva, al sur de Kiev. Papá murió unos meses después. No podía soportar el cambio”, comenta el hermano de Marsel. 

Marsel salió de Damasco después de que sus padres fueran evacuados. Con su pasaporte ucraniano pudo coger un avión de Líbano a Francia, matricularse en un máster y convalidar su título de arquitecto. Desde 2017 vive en París, una ciudad que conoce como la palma de su mano. “Todas las calles, las plazas, los restaurantes, lo sé todo. También conozco el resto de Francia, todos sus rincones”. 

Guerra en Ucrania, nuevo exilio  

En Ucrania, con su pequeña pensión (unos 40 euros al mes), la madre de Marsel, Ludmila, vivía como podía con el apoyo de sus dos hijos, que le enviaban dinero. Pero el 24 de febrero de 2022 la guerra volvió a ella. Cuatro días después de la invasión rusa, abandonó Bila Tserkva. Le llevó cuatro días llegar a París e interminables horas en la frontera entre Ucrania y Hungría y en la estación de trenes de Budapest. 

Ahora ya está en París. “Pude encontrar alojamiento para ella gracias a amigos que no suelen estar en París. En el piso está lo único que realmente necesita… un piano”, dice Marsel. “En unos días consiguió los papeles y ayuda del estado. Recuerdo las dificultades de mis amigos sirios cuando llegaron. No fueron tratados de la misma manera”, recuerda Marsel. 

Hoy Marsel es project manager en un estudio de arquitectura, después de haber trabajado unos años en interiorismo y escenografía para ferias nacionales e internacionales. 

Realmente nunca le faltó trabajo y no tuvo que soportar el estatus de refugiado. Tiene un permiso de residencia válido, primero como estudiante y luego como empleado, pero cada renovación de la documentación le ha hecho sudar. 

“Hablo árabe y ruso, mis idiomas paterno y materno, hablo inglés y francés, cuatro de los seis idiomas oficiales de las Naciones Unidas. Soy hijo de la solidaridad internacional”. 

A Marsel le gustaría diseñar algún día escuelas para refugiados y refugiadas, escuelas donde los niños puedan aprender, jugar, crecer y florecer, como los demás. Y devolver lo que las escuelas de las Naciones Unidas, las escuelas de UNRWA, han hecho por él. 

Texto original extraído de UN Regional Information Center. 

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UNRWA es la Agencia de Naciones Unidas para la población refugiada de Palestina en Oriente Medio. Desde 1949 trabajamos para proporcionar asistencia, protección y defensa a más de 5 millones de refugiados y refugiadas de Palestina, que representan más de la quinta parte de los refugiados del mundo y que actualmente viven en campamentos de refugiados en Jordania, Líbano, Siria y el territorio Palestino ocupado (la franja de Gaza y Cisjordania), a la espera de una solución pacífica y duradera a su difícil situación.

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