Has elegido la edición de . Verás las noticias de esta portada en el módulo de ediciones locales de la home de elDiario.es.

‘Cole’ pequeño, ‘cole’ grande: una misma huelga

Juan Miguel Baquero

[if gte mso 9]> Normal 0 21 false false false ES X-NONE X-NONE MicrosoftInternetExplorer4

[if gte mso 9]>

Son polos opuestos. Por un lado, en Osuna (Sevilla) está el colegio público más grande del universo escolar andaluz, el CEIP Rodríguez Marín, con 1.007 alumnos matriculados. Como hermano pequeño de la educación en la región, con 45 estudiantes, encontramos centros como el CEIP Nuestra Señora de las Veredas, en Guadalema de los Quinteros, una pedanía de la localidad sevillana de Utrera.

Seguimiento de la protesta

Primer dato, seguimiento de la huelga: en Osuna, más del 70 por ciento del alumnado la secundó. En Guadalema, el 100 por cien. ¿Problemas, incidencias? Ninguno. Todo transcurrió con total tranquilidad en estas comunidades educativas. ¿Necesidades, reivindicaciones? Muchas. Desde la reducción de partidas presupuestarias al mantenimiento de las propias edificaciones, carencia de actividades extraescolares o supresión de plazas de comedor. Insuficiencias que no paliará, aseguran, la nueva ley de educación.

Los alumnos de infantil y primaria de Guadalema, 45 niños de entre 3 y 12 años, no tienen que desplazarse a diario al municipio matriz, como ocurre en otros casos, desde su poblado –con algo más de 600 habitantes y enclavado en una zona con varias aldeas de colonización entre Los Palacios y Villafranca, Las Cabezas y la propia Utrera. Las familias, dedicadas en su mayor parte a tareas agrícolas, se informaron en el propio centro de las razones de la huelga y decidieron, por unanimidad, no llevar a sus hijos a clase.

“Sin ningún incidente, con total normalidad”

El director del centro de Guadalema, José Alberto Cotrino, explica que de los seis maestros sólo uno secundó un día de paro escolar que finalizó “sin ningún incidente, con total normalidad”. Los niños, cuenta, “ni siquiera se ven por las calles; con el mal día, estarán en casa tranquilos”. Lo que más sufren en el cole, asevera, “es el tema del mantenimiento, tanto de pequeñas cosas como de grandes arreglos”, un deterioro que no pueden afrontar con un presupuesto mimético en el último quinquenio.

El colegio utrerano carece de aula matinal, comedor y actividades extraescolares, difíciles de conseguir en todo caso por el número de alumnos. Un déficit que continuará y que casa con uno de los problemas del mayor colegio de Andalucía, el Rodríguez Marín, donde poco más del 10 por ciento del profesorado hizo huelga, porque muchos maestros empiezan a acusar el descuento en el salario que supone una jornada de paro. Su director, Fidel González, explica que para los más de 1.000 alumnos sólo hay 171 plazas de comedor, que el centro comparte con otro de la localidad adscrito. “No hay ni un 10 por ciento de plazas”, resume, lo que supone “un problema” en un colegio “mastodóntico”.

Problemas con las plazas de comedor y de vigilancia

Muchos estudiantes por tanto quedan fuera por falta de plazas y por incumplir unos requisitos concebidos para conciliar vida familiar y laboral y que ahora no cuadra con la situación económica actual. Un “recorte” perjudicial está también en el número de conserjes, “teníamos dos y este año ya sólo uno”. Un trabajador municipal acude “unas horas para que habilite las puertas de entrada y salida de infantil”. Igual, se resiente la vigilancia del colegio por las tardes y han disminuido las plazas bonificadas para actividades extraescolares.

“La jornada ha sido muy tranquila”, comenta, aunque existía “cierta incertidumbre entre los padres, a los que se había explicado en que consistía” una convocatoria contra la LOMCE cuyos contenidos conocían también a través de la asociación de padres y madres. Sabían, así, “en qué va a repercutir en nuestro futuro educativo” una ley que restringirá, por ejemplo, “la opinión de las familias en el funcionamiento del colegio”. Entiende además que la reforma llega tras una “consecución de recortes” y que, el texto, los justifica para que las administraciones “puedan seguir si lo estiman oportuno”.

Etiquetas
stats