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Hong Kong tendrá una “sucursal” de la Ciudad Prohibida pequinesa
El territorio de Hong Kong tendrá una réplica de 10.000 metros cuadrados de la Ciudad Prohibida, el antiguo palacio imperial chino de Pekín, en su distrito cultural de la península de Kowloon, informó hoy la prensa de la excolonia británica.
Responsables del famoso monumento pequinés y de Hong Kong firmaron el viernes en la capital china el acuerdo que pone en marcha este proyecto, con un coste de 3.500 millones de dólares y cuyas obras empezarán en 2017, coincidiendo con el vigésimo aniversario del retorno de la excolonia a la soberanía china.
El jefe ejecutivo de Hong Kong, Leung Chun-ying, quien presenció el acuerdo y se reunió el viernes con el presidente chino, Xi Jinping, en Pekín, calificó el acuerdo como “el mejor y mayor regalo para celebrar los 20 años de retorno a la patria”, en declaraciones que hoy recoge el diario local South China Morning Post.
Financiado por el Jockey Club (gestor de las carreras de caballos en la excolonia, y una de las organizaciones más antiguas de Hong Kong), el proyecto culmina la cooperación entre este territorio y la Ciudad Prohibida, que se inició en 2012.
La réplica acogerá exhibiciones permanentes de tesoros de la China imperial, destacó el Gobierno de Hong Kong en un comunicado.
Se prevé que las obras se completen en 2022, y que el recinto cuente con un teatro, una tienda de recuerdos y un restaurante, añadió la nota oficial.
El acuerdo fue firmado por la presidenta del distrito cultural de Kowloon Oeste, Carrie Lam (quien también es la “número dos” del Gobierno de Hong Kong) y el director del Museo de Palacio de la Ciudad Prohibida, Shan Jixiang, con la presencia también del ministro de Cultura chino, Luo Shugang.
La Ciudad Prohibida de Pekín, al norte de la Plaza de Tiananmen, es una de las mayores atracciones turísticas de China, con 14 millones de visitantes anuales.
El Gobierno de China está intentando aumentar los intercambios con Hong Kong, en un momento de tensiones en la excolonia por la proliferación de protestas contra el régimen comunista chino -que vivieron su momento culminante en la “Revolución de los Paraguas” de 2014- y la aparición de partidos independentistas en el territorio.
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