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Sobre este blog

No nos gusta la palabra “discapacitado”. Preferimos retrón, que recuerda a retarded en inglés, o a “retroceder”. La elegimos para hacer énfasis en que nos importa más que nos den lo que nos deben que el nombre con el que nos llamen.

Las noticias sobre retrones no deberían hablar de enfermitos y de rampas, sino de la miseria y la reclusión. Nuria del Saz y Mariano Cuesta, dos retrones con suerte, intentaremos decir las cosas como son, con humor y vigilando los tabúes. Si quieres escribirnos: retronesyhombres@gmail.com

Antonio Centeno: “No hay manual para la vida independiente; no es fácil pasar de sonreír a los familiares a dar órdenes”

"Nada sobre nosotros sin nosotros", marcha en defensa de la vida independiente. /  Fuente: OVI Barcelona.

Pablo Echenique-Robba

Hola, Antonio. Yo te conozco (virtualmente), pero supongo que muchos de nuestros lectores, no. Así que lo primero es hablar un poco de ti. Que te presentes un poco, que enseñes tus credenciales, todo eso. El objetivo, por supuesto, es que la gente se forme unos sólidos prejuicios sobre tu persona y sepa de qué pie cojeas.

Creo que es importante destacar que soy de las pocas personas que no cojea de ningún pie [se ríe y no sabemos si lo dice porque se mueve en silla de ruedas o porque no es de izquierdas ni de derechas, como UPyD... Sospechamos que se refiere a lo primero]. Me llamo Antonio Centeno, fui profesor de matemáticas de secundaria hasta el 2010, y ahora ando metido en bastantes iniciativas relacionadas con la diversidad funcional y la vida independiente. Escribo habitualmente en social.cat, colaboro con Solcom (la “Amnistía Internacional de los cascaos”), participo del proyecto de diseño libre y colaborativo “En torno a la silla”, estoy realizando un documental sobre sexualidad y diversidad funcional llamado “Yes, we fuck!” y formo parte de la OVI de Barcelona.

Joder, con eso de la sexualidad me has dejado traspuesto. Yo quería hablar de la OVI de Barcelona, ahora me parece poca cosa... Pero, bueno, ya hablaremos de sexo en otra ocasión. Sigamos con el plan. Explícame, por favor, ¿qué es una OVI y que haces tú allí?

OVI son las siglas de “Oficina de Vida Independiente”. La OVI de Barcelona es un grupo de personas con diversidad funcional que nos auto-organizamos para sacar adelante todos los pasos, papeleos y detalles que hay que solucionar cuando se contrata un asistente personal y se utilizan sus servicios para conseguir llevar una vida independiente.

Asimismo, somos quienes canalizamos la inversión que permite pagar el sueldo a estos asistentes. Y, muy importante, aprendemos a utilizar la asistencia personal compartiendo experiencia entre nosotros. Somos una asociación, aunque la forma administrativa es lo de menos, ya que funcionamos de un modo totalmente horizontal.

O sea, que los asistentes están pagados. ¿Por quién? ¿Quién financia la OVI?

La financia el Ayuntamiento de Barcelona.

¿Y cómo funciona?

Pues, por un lado, el Ayuntamiento firma un acuerdo con el “usuario” (son mucho más que usuarios, son personas implicadas, autogestoras) en el que consta su plan de asistencia, es decir, las horas que necesita. Por otro, el Ayuntamiento tiene un acuerdo con la OVI, transfiere el dinero necesario a ésta en función de las facturas presentadas y es la OVI quien contrata a los asistentes.

¿Qué tipo de cobertura ofrece la OVI? ¿Cuántas horas por retrón?

Cada uno recibe lo que necesita, para todo lo que haga falta. Los asistentes son tus pies y tus manos. La media son 7 horas al día, pero hay gente que necesita 5 y gente que necesita 14. Nos costó mucho convencer al Ayuntamiento de que no se podía poner un tope basado en el promedio. Al final, hay poca gente que necesite muchas horas y las cuentas salen. Aunque todo esto a día de hoy está sin protocolizar. Se hace así porque se hace así... Ahora toca pasar del experimento a la cartera de servicios.

¿Los usuarios eligen a su asistente personal o los elige la OVI?

Los asistentes los elige el usuario con total libertad. Si el usuario quiere despedir a su asistente, lo despide, y ya está. La OVI no cuestiona las decisiones personales. Por supuesto, cada persona tiene en cuenta la legalidad vigente y los costes del despido que harán disminuir el presupuesto individual.

¿Qué requisitos hay que cumplir para poder acceder a los servicios que presta la OVI?

La OVI empezó en noviembre de 2006 como un proyecto piloto y entonces era un grupo cerrado de 9 personas. En verano de 2007, el Ayuntamiento lo convirtió en un programa y, en ese momento, se unieron a él dos entidades sin ánimo de lucro, la llamada ECOM y la Pere Mitjans. Ahora uno diría que el grupo es abierto, pero el Ayuntamiento va aceptando a la gente a su libre albedrío. Esto tampoco está protocolizado y nadie sabe muy bien cómo funciona, la verdad. En la última reunión se nos dijo que haríamos un grupo de trabajo para resolverlo.

¿Se llega a todo el mundo que lo necesita?

Rotundamente, no. Hoy en día se presta el servicio a unas 30 o 35 personas en toda la ciudad de Barcelona, ocho de las cuales están en la OVI (cuando firmas el contrato con el Ayuntamiento, hay una casilla en la que eliges si prefieres ECOM, la OVI o Pere Mitjans; puedes cambiar siempre que quieras). Obviamente, esto es una parte ínfima de la gente que necesita asistencia personal.

¿Recibir servicios por parte de la OVI (o de ECOM) es compatible con la retribución que la persona pueda percibir a través de la Ley de Dependencia?

No, no lo es. De hecho, todo el asunto con la Ley de Dependencia es bastante delirante. Primero nos piden que pasemos el baremo de la ley (todos en la OVI somos Grado III), luego tenemos que pedir el PIA (plan individualizado de atención), solicitar la prestación y, finalmente, renunciar a ella.

El Ayuntamiento paga la totalidad de la asistencia, lo cual, puesto que no tienen una máquina de imprimir billetes, es un poco raro. Mi hipótesis es que, posiblemente, no han querido sentar el precedente de que el Ayuntamiento complemente una prestación estatal.

Además, este modo de proceder supone un salto en el vacío. Estás renunciando a un derecho a cambio de firmar un contrato por un año...

¿Qué perspectivas de futuro tenéis?

Dentro de lo que cabe, no veo el futuro negro. Tengo esperanza. El tema de la vida independiente se ha convertido en transversal en el Ayuntamiento de Barcelona. Empezamos con una alcaldía PSC-ICV y seguimos con CiU. No hay dos cosas más distintas que ICV y CiU en Cataluña y, sin embargo, ambos Gobiernos han apoyado la iniciativa. Esto es esperanzador. Está en el plan municipal. Es algo importante.

¿Hay otras OVI funcionando en España aparte de la de Barcelona?

Hay una en Madrid, y hay una en Andalucía, pero ésta no gestiona nada. La han montado para intentar conseguirlo. Creo que en Valencia pasa algo similar. En Galicia funciona una, pero gestionando recursos muy escasos. En Guipúzcoa ocurre algo curioso: si uno mira las estadísticas, casi todas las prestaciones por asistencia personal están en esa provincia. Allí es el Estado quien tira del carro, no hay una OVI funcionando, aunque no conozco todos los detalles.

¿Crees que el modelo de las OVI es escalable? ¿Crees que sería logísticamente factible extenderlo a todas las personas que lo necesiten (suponiendo, claro está, que la Tierra empiece, de repente, a girar al revés y Mariano Rajoy sea poseído por el espíritu de Karl Marx)? ¿No piensas que sería más sencillo que el Estado diese al retrón directamente el dinero y éste contratase asistentes según su apetencia y necesidad?escalable

En primer lugar, no creo que haga falta que Marx posea a nuestro presidente. La vida independiente tiene diferentes ventajas y las hay tanto para el gusto de la izquierda como para el de la derecha. A los primeros se les puede hablar de dignidad, de igualdad, de ciudadanía y de derechos humanos. A los segundos, de eficacia en la gestión de recursos, del fomento de la independencia y la participación activa. Lo bueno del caso es que todos los argumentos son ciertos.

En cuanto a la logística, sin duda lo más sencillo es dar el dinero. Pero esto limita el perfil de la gente que puede acceder al servicio. En primer lugar, por todo el asunto de llevar a cabo la contratación. Es una gestión complicada que no todo el mundo sabrá hacer en un primer momento. En este sentido, el apoyo de una OVI te puede venir muy bien. Al margen de esto, yo creo que una OVI pequeña, estructurada como la nuestra, en la que la gente pueda hablar cara a cara es muy positiva para aprender, discutir y mejorar toda la parte más personal del proceso. No hay manual para la vida independiente; no es fácil pasar de sonreír a los familiares a dar órdenes. A vivir se aprende viviendo, y no hay más guía que el apoyo entre iguales. Cuando la OVI tenga el doble de personas, se dividirá en dos, y así sucesivamente hasta cubrir en red todo el territorio.

Me he enterado de que tenéis unas jornadas pronto.

Así es. Este 14 y 15 de noviembre, tenemos un evento en el Parc Tecnològic Barcelona Nord titulado “Serveis i eines per a una vida independent” (Servicios y herramientas para una vida independiente). Asisten todas las partes implicadas: el Ayuntamiento, la OVI, ECOM y Pere Mitjans. Así como otras instituciones muy relacionadas con todo el tema de la vida independiente. Vendrá, por ejemplo, Xabier Urmeneta, la persona que esta al frente de la iniciativa gipuzcoana que te comentaba antes, y también representantes de ULOBA, la cooperativa Noruega de vida independiente, o de ENIL, la red europea.

Por último, estamos muy ilusionados porque se va a presentar un informe que encargó el Ayuntamiento a una auditoría para evaluar el retorno social de la inversión en vida independiente en Barcelona durante todos estos años. Tengo motivos para pensar que los resultados son muy positivos y espero que ello permita que se impulse el tema y consigamos llegar pronto a todo el mundo que necesita asistencia personal.

Eso espero, Antonio. Muchas gracias por la información, y ya nos contarás.

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No nos gusta la palabra “discapacitado”. Preferimos retrón, que recuerda a retarded en inglés, o a “retroceder”. La elegimos para hacer énfasis en que nos importa más que nos den lo que nos deben que el nombre con el que nos llamen.

Las noticias sobre retrones no deberían hablar de enfermitos y de rampas, sino de la miseria y la reclusión. Nuria del Saz y Mariano Cuesta, dos retrones con suerte, intentaremos decir las cosas como son, con humor y vigilando los tabúes. Si quieres escribirnos: retronesyhombres@gmail.com

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