Nueva ley planteará que los menores de 3 años estén acogidos por familias

Favorecer el acogimiento familiar frente al residencial, garantizado en el caso de los niños de tres años y si es posible hasta los seis, es uno de los objetivos del anteproyecto de ley de protección a la infancia, que se prevé que entre en el Parlamento este año para aprobarse en la legislatura.

Soluciones estables frente a temporales, familiares frente a residenciales y consensuadas frente a impuestas es el espíritu que anima esta nueva ley, en la que se ha ido de la mano de autonomías, profesionales y expertos, según ha explicado hoy en Valladolid la directora general de Servicios para la Familia y la Infancia del Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, Salomé Adroher.

En cuanto al acogimiento, este anteproyecto recoge las principales líneas de la normativa en este apartado de Castilla y León, una comunidad pionera en esta materia y que hoy ha celebrado, organizado por Cruz Roja, los 25 años de puesta en marcha del programa de acogimiento familiar, por el que han pasado, según la consejera autonómica de Familia, Milagros Marcos, unos 4.000 menores.

Durante su intervención, Adroher ha confiado en que se pueda contar con el proyecto de ley antes de Navidad para enviarlo a las Cortes Generales y que pueda ser aprobado, “cruzando los dedos”, antes de que concluya la legislatura.

Otra de las novedades será el reconocimiento del estatuto del acogedor, una de las principales demandas de las familias acogedoras y, en la línea de la normativa con la que ya cuenta Castilla y León, la nacional recogerá el acogimiento familiar para los niños de tres años y a ser posible hasta los seis.

Se trata de “ir poniendo plazos y retos” para que cada vez haya más niños desprotegidos con familias en lugar de en centros de acogida, ha recordado Adroher.

Además, se incluirá en la futura norma una revisión de la situación de cada niño acogido y con cierta periodicidad.

La responsable de Familia e Infancia del Ministerio ha incidido en que vivir en familia es fundamental para crecer y aprender a ser personas, y debe ser una aspiración para todos los menores declarados en desamparo.

Según datos de 2012, en España hay 13.703 menores en acogimiento residencial, que en buena parte pueden estar con familias.