Un hotel de cuatro estrellas y 110 camas: el proyecto bloqueado en Lanzarote por ir contra el planeamiento urbanístico

El Cabildo de Lanzarote ha bloqueado este lunes la construcción de un hotel de cuatro estrellas en el núcleo turístico de Playa Blanca (Yaiza). La corporación insular ha rechazado conceder la autorización turística a este proyecto que pretende crear 110 camas en el sur de la isla por no ajustarse al planeamiento urbanístico.

El suelo en el que se preveía levantar este complejo está clasificado para uso residencial unifamiliar en el planeamiento vigente. Además, el proyecto cuenta con un informe desfavorable del Ayuntamiento de Yaiza, un documento que es preceptivo y vinculante.

La resolución de la corporación municipal recoge que el Tribunal Superior de Justicia de Canarias y del Tribunal Supremo anularon parcialmente el Plan General Supletorio de Yaiza en la franja litoral, lo que reactivó el plan parcial anterior, Montaña Roja (1979). Este solo permite viviendas unifamiliares o bungalows, pero no establecimientos hoteleros.

El Gobierno de Canarias dio luz verde a este hotel de 55 unidades en 2022, justificando que el proyecto garantizaba ''el mínimo impacto medioambiental en ahorro de agua, contaminación acústica y lumínica y gestión de residuos''. Sin embargo, para que la obra pudiera salir adelante era necesaria la autorización del Cabildo insular, desestimada tres años después.

La promotora de este hotel, denominado Le Silence, es la empresa Kufer 2000 S.L., que ya firmó en mayo de 2025 un convenio de colaboración con el Servicio Canario de Empleo para la formación de personal amparándose en su previsión de desarrollar un hotel en Montaña Roja.

La capacidad de carga de la isla, superada

El presidente insular, Oswaldo Betancort (CC), ha defendido que ''no se trata de estar a favor o en contra de proyectos concretos, sino de garantizar que cualquier desarrollo en la isla respete la normativa, el planeamiento vigente y la capacidad de carga del territorio''. ''Lanzarote debe crecer con orden, con transparencia y con respeto a nuestro entorno'', añadió.

En mayo de 2023, poco antes de que terminara la legislatura pasada, el Gobierno insular inició los trámites para calificar Lanzarote como zona turística saturada. El Ejecutivo de Dolores Corujo (PSOE) encargó un estudio que concluyó que la isla había ''desbordado con creces su capacidad de carga turística''. Este territorio de 150.000 habitantes cuenta desde 2017 con una cifra de visitantes 20 veces mayor que la de residentes.

El análisis, elaborado por la consultora Gaia Consultores Insulares SLU, ya alertó de que ''los indicadores muestran que aún no se ha abandonado la cultura del desarrollo turístico, basado en el aumento del número de turistas y de la capacidad de la planta alojativa''.

''Tampoco se ha abandonado el binomio turismo-construcción como concepto erróneo de progreso turístico'', concluyó el diagnóstico, que además enfatizaba en que mientras el número de turistas crecía, también lo hacía la cifra de personas que en Lanzarote viven bajo el umbral de la pobreza, pasando de un 9,4% en 2001 a un 18.4% en 2018.