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La sociedad urbana debe “empaparse” de la cultura rural pero respetándola

La sociedad urbana debe "empaparse" de la cultura rural pero respetándola
Madrid —

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Madrid, 29 sep (EFE).- La sociedad urbana debe “introducirse en los entornos naturales y empaparse de la cultura de la España rural”, pero manteniendo el cuidado y respeto por el medio para evitar el deterioro de estas zonas, han explicado hoy los periodistas ambientales Javier Rico y Rafael Serra.

Rico -autor de la 'Guía de la España rural'- y Serra -de 'Sierras de Gredos y Béjar'- han participado hoy en una nueva edición de Lecturas Verdes, foro de la Asociación de Periodistas de Información Ambiental (APIA), para analizar y poner en valor las publicaciones sobre medioambiente y naturaleza.

Ambos han examinado la atracción que en los últimos tiempos han empezado a ejercer las áreas rurales gracias a las publicaciones de jóvenes en redes sociales: un fenómeno que, han advertido, puede generar “importantes impactos medioambientales” en algunos entornos rurales “muy sensibles” que no deberían recomendarse “por miedo a que se masifiquen”.

En ese sentido, Serra detalla en su obra el entorno y la biodiversidad de estas sierras del Sistema Central “sin necesidad de recorrer grandes distancias” pero también facilita pautas para evitar que la presencia de visitantes contribuya al deterioro de este paraje natural.

“Existen zonas espectaculares muy cerca de Madrid que pueden visitarse sin presencia apenas de otros turistas”, ha asegurado, mientras que otros lugares que él personalmente recordaba como dignos de ver “ahora son dignos de esquivar” por culpa de la masificación y de las personas que “incumplen las normas éticas a la hora de moverse por el entorno rural”.

Rico también ha defendido este “valor del territorio”, basándose no sólo en el mismo sino en el de los vecinos afincados en él.

En la actualidad, ha señalado, “existe una desconexión rural por parte de una sociedad sumergida en las pantallas de sus móviles” que debería relacionarse más con los habitantes de estos entornos porque “sólo ellos van a poder decirte qué hay más allá del destino que buscabas en Google”.

En su libro no se ha limitado a indicar qué ver, dónde comer o dónde dormir sino que ha decidido “abrir una puerta hacia la Naturaleza” para que el lector con curiosidad pueda llegar a “nuevas experiencias” guiado por profesionales locales “que se preocupan por la conservación de esos espacios naturales”.

Los dos autores se han mostrado partidarios de fomentar ese espíritu curioso gracias a la divulgación y la concienciación para que cada cual “tire del hilo y le coja el gusto al turismo rural y medioambiental”.

De todas formas, Serra ha lamentado que el mundo rural “ya no es lo que era hace 15 años”, pues la cultura de antaño “ha desaparecido” a causa de la globalización y ha transformado la España rural por completo.

Rico, sin embargo, ha indicado que todavía “hay gente joven que lucha por su territorio” y vuelve a casa para emprender después de vivir en las grandes ciudades.

Los protagonistas de esta edición de Lecturas Verdes han insistido en que no sólo se trata de disfrutar de la belleza de un paisaje, sino de conocer iniciativas rurales que promuevan la economía local y vivir experiencias novedosas como, por ejemplo, la observación de las aves “luchando contra el viento y las olas del mar” en la costa atlántica en pleno diciembre.

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