La portavoz del Gobierno de Zaragoza: “PP y Ciudadanos gobernamos en minoría y necesitamos a los concejales de Vox”
- Sobre si hay opciones de variar la estructura de Gobierno en el futuro para dar cabida a los de extrema derecha, ha afirmado que no tiene “una bola de cristal para adivinar el futuro”
El alejamiento de PP y Vox en Madrid parece no afectar a las relaciones de ambas fuerzas en el Ayuntamiento de Zaragoza. Al menos es lo que ha dado a entender la portavoz del Gobierno de la ciudad, María Navarro (PP), que ha asegurado que lo sucedido a escala nacional no es extrapolable a Zaragoza.
En la capital aragonesa, el gobierno lo forman PP y Ciudadanos; Vox (de momento) se tendrá que conformar con dos concejalías de Distrito (que en este Ayuntamiento se reparten entre todos los grupos, es decir, no hay un guiño especial a los de extrema derecha). Entre populares y naranjas suman 14 concejales, los dos que se necesitaban para investir alcalde a Jorge Azcón (PP) vinieron de Vox.
Son los dos votos que, como ha reconocido Navarro, van a necesitar a lo largo de la legislatura para sacar adelante acuerdos: “Gobernamos en minoría con Ciudadanos y somos conscientes de que vamos a necesitar el apoyo de los concejales de Vox”. El diálogo con esta formación, ha señalado, “está abierto desde el minuto uno, no nos han pedido nada y la relación es fluida”.
El Gobierno se estructura en ocho áreas (más la Alcaldía) que se reparten a partes iguales entre PP y Ciudadanos. Sobre si hay posibilidades de que esta disposición varíe en el futuro para dar cabida a Vox, Navarro ha sido enigmática: “No tengo una bola de cristal para adivinar el futuro”.
Auditoría
Este miércoles ha tenido lugar la primera reunión del Gobierno de Zaragoza en la que ha quedado constituida la Junta de Gobierno Local. En ella se ha aprobado encargar a la Intervención General del Ayuntamiento de Zaragoza la elaboración de un exhaustivo informe sobre la situación económico financiera del sector público municipal a fecha actual, cuya finalización se espera para el próximo mes de septiembre.
Este acuerdo, han explicado, “responde al acuerdo programático que sustenta al actual Gobierno de la ciudad y pretende auditar el estado real de las cuentas de la institución con el objetivo de conocer, a la mayor brevedad posible, la información necesaria sobre el endeudamiento, las sentencias judiciales pendientes de pago, las deudas con otras administraciones, las facturas pendientes con los proveedores, la situación del personal municipal o cuestiones relacionadas con la contratación pública”.
La decisión del Gobierno de Zaragoza encomienda directamente esta labor al máximo órgano fiscalizador y solicita, además, la elaboración de “un análisis de las debilidades, deficiencias, errores, incumplimientos y riesgos”, que permita disponer posteriormente las medidas político-administrativas para corrección.
