Canarias normaliza el Protocolo de Cirugía Menor en Atención Primaria que tuvo 2.500 procedimientos en 2009
LAS PALMAS DE GRAN CANARIA, 25 (EUROPA PRESS)
La consejera de Sanidad del Gobierno de Canarias, Mercedes Roldós, y la directora general de Programas Asistenciales, Julia Nazco, presentaron hoy el Protocolo de Cirugía Menor en Atención Primaria, que pretende facilitar la implantación de este servicio a través de la normalización de procedimientos fundamentados en la evidencia científica y que supuso 2.500 acciones en 2009.
Así, durante este año se normalizará esta actividad en cinco unidades, que realizaron ya en 2009 los 2.500 procedimientos, y que se encuentran distribuidas en Tenerife (centros de salud de Taco y Puerto de La Cruz-La Vera), Gran Canaria (centros de salud de Barrio Atlántico y Schamann) y Fuerteventura (futura puesta en marcha en el Centro de Salud de Puerto del Rosario).
La puesta en marcha de este modelo de actuación está centrado, según informó el Gobierno canario en nota de prensa, en el cumplimiento de uno de los principios básicos de la Atención Primaria, tales como “aumentar la accesibilidad” en la oferta de servicios sanitarios a la población sobre la base de la evidencia científica y con criterios de “seguridad, efectividad y eficiencia”.
En cuanto a los objetivos “específicos” se centran en la creación de unidades de cirugía menor avanzada en las zonas básicas de salud (ZBS) priorizadas, dotadas de mayor capacidad resolutiva (criocirugía, lectrocirugía) para lesiones con determinadas características o mayor nivel de complejidad; impulsar la realización de actividades de cirugía menor básica en todas las ZBS tanto en centros de salud como en consultorios locales; y potenciar la realización de actividades de docencia e investigación sobre cirugía menor en Atención Primaria.
Respecto a la cirugía menor se realiza de manera habitual en los centros de salud y consultorios locales de Canarias con diferentes grados de complejidad. Ante la necesidad de “homogeneizar y mejorar” la calidad de esta actividad en las islas, el Servicio Canario de la Salud (SCS) ha publicado este manual, con la colaboración de numerosos profesionales sanitarios.
De esta forma, se ha conseguido un documento de “referencia y apoyo” a los profesionales sanitarios y una “garantía de mejora” de la calidad de la prestación para los usuarios, lo que evitará molestias y mejorará los tiempos de espera para resolver procedimientos quirúrgicos que pueden ser realizados en Atención Primaria.
El Protocolo abarca diferentes aspectos, tales como el perfil de las personas que pueden recibir el servicio y en las que está contraindicado, los requisitos mínimos para la puesta en marcha de la actividad, el circuito asistencial que seguirá el paciente, aspectos médico-legales, manejo de muestras de tejidos, así como diversos anexos.
Este documento también incorpora una Guía de Procedimientos Quirúrgicos y recomendaciones para la limpieza, desinfección, esterilización, asepsia e higiene en Cirugía Menor. La evaluación de este servicio, según los criterios que establece el Protocolo, contribuirá “a mejorar progresivamente” la actividad en términos de resultados en salud y satisfacción de los pacientes, así como de los profesionales.
INFRAESTRUCTURAS Y MATERIALES PRECISOS
La implantación del Protocolo de Cirugía Menor en Atención Primaria, además de contar con profesionales formados, deberá existir una infraestructura y recursos materiales “precisos a fin de garantizar” las condiciones técnicas y de seguridad “necesarias”.
Respecto a la cirugía menor, en cada ZBS se examina la posibilidad de llevar a cabo este servicio, bien individualmente entre los profesionales del EAP (Especialista en Atención Primaria) o por medio de líderes quirúrgicos que asuman la actividad de toda la ZBS.
La carga de trabajo deberá ajustarse para que la práctica de la cirugía menor no suponga un incremento de la presión asistencial. Las actividades de despistaje, diagnóstico y tratamiento serán llevadas a cabo por los profesionales médicos y de enfermería de los EAP en las consultas a demanda y concertadas correspondientes, siendo el médico el responsable de la decisión diagnóstico-terapéutica.
Además, se procurará garantizar la continuidad de los profesionales que integren las unidades para conseguir una optimización de la actividad quirúrgica.
En cuanto a la cirugía menor avanzada, el equipo mínimo estará integrado por un cirujano o médico de familia que será el responsable de la unidad de cirugía menor avanzada, un enfermero y un auxiliar de enfermería. “Todos dispondrán de dedicación exclusiva a la unidad, debiendo garantizarse la adecuada formación de estos profesionales”.
Las unidades de cirugía menor avanzada deberán estar coordinadas con los servicios de cirugía general y de dermatología de referencia y los servicios de cirugía menor básica se coordinarán con la unidad de cirugía menor avanzada de referencia que actuará como consultora.
Respecto a las actividades de cirugía menor en los centros de salud contribuye a dotar a este nivel de atención de una mayor capacidad resolutiva, siendo esta una oportunidad de “confianza y aumentar” el prestigio que debe tener ante la población para contribuir a mejorar el sistema sanitario desde el punto de vista de la eficiencia.
