Sanidad recupera a otro alto cargo de la última etapa de Coalición Canaria
Su nombre estaba en todas las quinielas desde que se consumó el regreso de Conrado Domínguez a la dirección del Servicio Canario de Salud (SCS), pero su designación ha tardado en materializarse casi dos meses. El doctor Pedro Rodríguez, especialista en Cirugía Torácica, asume de nuevo la gerencia del Hospital Doctor Negrín de Gran Canaria, un cargo que ya ocupó en la segunda mitad de la pasada legislatura, tras la ruptura del pacto de gobierno que habían suscrito Coalición Canaria (CC) y el PSOE, la salida del Ejecutivo de los consejeros socialistas y la llegada a Sanidad del matemático José Manuel Baltar, ex director de Operaciones del grupo hospitalario privado San Roque.
Rodríguez sustituye en el cargo al neurocirujano Jesús Morera, que abandonó el puesto nada más concretarse la vuelta de Domínguez. El también exconsejero de Sanidad cesó de la dirección de uno de los cuatro grandes complejos hospitalarios del Archipiélago “de mutuo acuerdo” con el presidente del Gobierno de Canarias, su compañero de partido Ángel Víctor Torres (PSOE), tras manifestarle su incompatibilidad con “la forma de hacer las cosas” y “el modelo de servicio de salud” que defiende el nuevo director del SCS, con quien mantuvo notorias diferencias a cuenta de los conciertos sanitarios y el mantenimiento de determinados servicios asistenciales externalizados en el Archipiélago durante la anterior etapa del economista como 'número dos' en la Consejería de Sanidad que lideraba Baltar.
La vacante que dejó Morera en el centro hospitalario había sido suplida hasta ahora, de forma interina, por la directora médica, Josefa Afonso. Entre los trabajadores del Hospital Doctor Negrín se había generado cierta inquietud por la tardanza en suplir el hueco que había dejado el anterior gerente. Fuentes internas consultadas por este periódico resaltan “el esfuerzo y la dedicación” de Afonso durante esta etapa para asumir esas tareas, pero destacan las dificultades para lidiar con la gestión de una pandemia en una organización donde el gerente ejerce un papel tan determinante. “Todo tiene que pasar por él”, afirman. El sindicato Asaca, una de las centrales con representación en Sanidad, ya había expresado su perplejidad por esa demora. “Seguimos sin entender cómo uno de los mayores hospitales públicos de Canarias puede estar sin gerente (no hay titular nombrado, sino en suplencia) mes y medio, cuando estamos en una situación crítica”, escribían en sus redes hace unos días.
El nombramiento de Pedro Rodríguez se llevó al Consejo de Gobierno del pasado viernes, según han confirmado fuentes oficiales del complejo hospitalario a este periódico. Antes de asumir por primera vez la gerencia del Negrín, en enero de 2017, Rodríguez ocupó (con Morera como consejero) el puesto de director médico del centro. Además, ha sido jefe de estudios y presidente de la Comisión de Docencia del centro. Es profesor asociado de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria, diplomado superior en Dirección y Gestión Sanitaria y autor de numerosas publicaciones.
Con el nombramiento de Rodríguez, la Consejería de Sanidad suma un nuevo regreso de un alto cargo que figuraba en el equipo de la última etapa de CC en solitario en el Gobierno y que fue destituido tras la llegada de la socialista Teresa Cruz al departamento. El nuevo gerente del Negrín es persona de máxima confianza de Conrado Domínguez, al igual que Abraham Luis Cárdenes, un funcionario de carrera que acompañó al actual director del SCS en su época como gerente de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria (ULPGC) y que desde hace dos meses ocupa el cargo de secretario general del organismo autónomo, el mismo del que había sido relevado en agosto de 2019 por el PSOE.
También han vuelto recientemente la directora general de Programas Asistenciales, Elizabeth Hernández, y el gerente de Atención Primaria en Gran Canaria, Carlos Jorge Acosta, que han sustituido, respectivamente, a Octavio Jiménez y Ricardo Redondas. El 27 de marzo, la fecha en la que se anunciaba la destitución de Teresa Cruz como consejera de Sanidad tras unas controvertidas declaraciones sobre el papel de Conrado Domínguez como coordinador del Comité de Gestión de la Crisis Sanitaria de la COVID-19, se confirmaba otro cambio en la Dirección General de Salud Pública. La lanzaroteña Concepción Gil abandonaba un puesto que recuperaba su anterior inquilino, el médico de familia José Juan Alemán.
Días después de la marcha de la socialista Teresa Cruz, la dirección del Área de Salud de Tenerife pasaba a manos de Ignacio López Puech, que en enero de 2017, tras el aterrizaje de Baltar y Domínguez en la Consejería, había asumido esa misma responsabilidad en un departamento clave para controlar las derivaciones hacia la sanidad privada. Con anterioridad, ya había ostentado cargos de responsabilidad en administraciones gobernadas por CC, entre otras la gerencia del Hospital Universitario de Canarias (HUC), antes de su polémico paso por la sanidad privada para dirigir el Hospital Parque de la capital tinerfeña, un ejemplo, según la Asociación para la Defensa de la Sanidad Pública, de puerta giratoria.
A estos nombres se les une el de Avelina Díaz, actual directora de Recursos Humanos del SCS, con una salvedad con respecto a los anteriores. Y es que, en su caso, no ha regresado al puesto que ocupaba con anterioridad. Tras la crisis de gobierno entre CC y PSOE en enero de 2017, Díaz fue nombrada directora de Gestión y Servicios Generales en la Gerencia de Servicios Sanitarios del área de salud de El Hierro, cargo del que también cesó tras las elecciones de mayo de 2019 y la llegada del PSOE a la Consejería de Sanidad.
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