La Junta urge a aprobar los Presupuestos porque “no basta con pasar la pelota de un lado a otro”
El Gobierno de Castilla-La Mancha no interpreta el ofrecimiento formal de Podemos para volver a negociar los Presupuestos de 2017 como un “pistoletazo de salida”. Desde el Ejecutivo regional consideran que ese inicio ya se dio en el que momento que se consensuaron las cuentas públicas con la formación morada antes del trámite presupuestario y que luego fueron rechazadas por su voto en contra. Así lo ha manifestado la consejera de Economía, Empresas y Empleo, Patricia Franco, en respuesta a las declaraciones del líder regional de Podemos, José García Molina, pidiendo la apertura de negociaciones con el presidente, Emiliano García-Page.
“Para mí, los trámites ya empezaron cuando las cuentas públicas se negociaron y se tumbaron después sin ninguna explicación”, ha subrayado. No obstante, ha afirmado que eso no impide que haya margen ahora para la aprobación de las cuentas, actualmente “muy necesarias”. Ha subrayado que después de que el consejero de Hacienda, Juan Alfonso Ruiz Molina, remitiera una carta a los grupos parlamentarios de PP y Podemos para reiniciar las conversaciones, ahora el deseo es que esas negociaciones “sean fructíferas” porque “la región lo necesita”.
“Hay que apostar por el futuro de la región, -explica- y eso supone dar pasos adelante en la aprobación de las cuentas. Podemos sabe cuál ha sido el espíritu del Gobierno regional a la hora de presentarlos, el giro que ha dado a la izquierda para solventar la situación social, sanitaria y educativa de los ciudadanos, y aunque puede haber algún punto a analizar con mayor detenimiento, no partimos de cero, hay mucho trabajo elaborado y si hay voluntad política, no se necesita mucho más”.
También ha querido recordar que durante las comparecencias de los consejeros en las Cortes para explicar sus respectivas partidas, hubo una oportunidad para que los grupos parlamentarios pudieran “cuestionar” lo presentado o “poner encima de la mesa sus propuestas”.
Pero pese a todo, la consejera afirma que el Gobierno está “abierto” a la negociación. “La región lo necesita, el tiempo juega en nuestra contra. Debemos tener margen de maniobra para ejecutar las políticas que tenemos proyectadas, y no basta con pasar la pelota de un lado a otro, hay que fijar posición”, ha concluido.
