La ministra de Sanidad reinvica el Sistema de Dependencia como una fuente de riqueza y de empleo

A día de hoy casi 60.000 personas reciben cerca de 70.000 prestaciones de dependencia en Castilla-La Mancha, una cifra que ha señalado la consejera de Bienestar Social, Aurelia Sánchez, durante la inauguración del II Simposio ‘La Atención a la Dependencia’, que se celebra durante dos días en el campus universitario de Albacete. “Estamos como la segunda Comunidad Autónoma en cobertura”, ya que en la región se alcanza el 90% de cobertura. Una cifras que han aumentado a lo largo de los últimos años, en la presente legislatura, con las que Castilla-La Mancha ha llegado a este 2019.

Este lunes ha comenzado en Albacete el II Simposio nacional sobre la atención a la dependencia que congrega a 400 profesionales de toda España para abordar el presente y el futuro de la atención a la dependencia. Una cita en la que han participado la ministra de Sanidad, Consumo y Bienestar Social, María Luisa Carcedo y el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, encargados de inaugurar el Simposio.

Carcedo, ha recordado los recortes que el Sistema de Atención a la Dependencia ha venido sufriendo, a nivel nacional, desde el año 2012 y que ha llevado a una “ralentización” de las prestaciones.

Y todo ello en un contexto en el que, con la salida de la crisis, “tanto en España como en el resto de países” la mayor esperanza de vida hace que “cada vez más personas requieran de servicios de mayor calidad”.

La ministra de Sanidad ha reivindicado el Sistema de Atención a la Dependencia como una fuente de empleo, alejando esa imagen de gasto, que años atrás se ha asociado a los servicios públicos para justificar los recortes. “El sector de cuidados es un nicho de empleo”, ha insistido la ministra, que asegura que por cada millón de euros que se invierte en el Sistema de Dependencia “se generan 34 puestos de trabajo”.

Uno de los motivos se puede ver en Castilla-La Mancha para que éste sea un sector en alza en la creación de empleo está en el mundo rural donde la población, cada vez más envejecida, “quieren vivir en su entorno, su casa, su hogar”, ha señalado la consejera de Bienestar Social que ha asegurado que en la región, hay el doble de estas prestaciones de proximidad. “ Lo fundamental es plantear un modelo que, de verdad, se adapte a las necesidades de las personas”.

Castilla-La Mancha, ejemplo del “cambio de paradigma”

Las cifras, según José Manuel Ramírez, presidente del Observatorio de la Dependencia, muestran un aumento d e prestaciones en la región. “En los 3 años y medio del Gobierno del presidente, todos los trabajadores que trabajan en la Consejería, todos los que están en el tajo, en los Servicios Sociales han conseguido que haya 24.000 nuevos beneficiarios”.

Esto es un aumento del 70% que ha llevado a la reducción de la lista de espera “del 44% a menos del 10%”, añade Ramírez que asegura que este proceso ha llevado a la generación “de más de 5500 puestos de trabajo, nuevos y directos”.

Precisamente las cifras sobre las prestaciones del Sistema de Dependencia en Castilla-La Mancha, le han valido al Gobierno regional la felicitación de la ministra de Sanidad que ha señalado “el cambio de paradigma” hecho por el Ejecutivo Autonómico “impulsando el sector de la Dependencia y atendiendo a las personas que lo necesitan y no tenían ninguna prestación”.

Dice Carcedo que el principal reto del Sistema de Dependencia, hoy por hoy, es la coordinación con el Sistema Sanitario. “Llevamos muchos años teorizando pero sigue siendo un gran desafío”.

El otro desafío, según la ministra, es “aprovechar la sabiduría, el cúmulu de experiencias y el conocimiento” de los trabajadores “bien formados y bien cualificados” que se enfrentan a una situación de pocos recursos debido a la “constricción” de los últimos años.

El “hurto” de 450 millones a la región

El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha sido el encargado de cerrar la inauguración del II Simposio ‘La Atención a la Dependencia. Retos e Innovación’ donde ha recordado que la dependencia es un concepto que arranca de un legislación novedosa, “que incorpora elementos de cofinanciación de las autonomías y privados, y durante una serie de años se han estado claramente hurtando desde un punto de vista presupuestario a las Administraciones”.

En este aspecto, García-Page ha reivindicado que “a la región a la que represento se la deben más de 450 millones de euros en dependencia” y se ha congratulado que el presupuesto público, “por primera vez en muchos años, haya intentado corregir este déficit, porque sino se consigue no será sostenible y el reparto es algo bueno a nivel social y también entre Administraciones”.