“Amb totes dues mans
alçades a la lluna,
obrim una finestra
en aquest cel tancat“
Estos versos de Maria Mercè Marçal, de su poema ‘Vuit de març’, los tengo muy presentes ahora que hemos iniciado el periodo precongresual del Bloc.
Se abre un tiempo para repensarnos, para evaluar el camino recorrido, para mirarnos, hablar y, está claro, sobre todo para escuchar. El objetivo es llegar a nuestro Congreso y decidir entre todas y todos hacia dónde hay que dirigir la proa y como pondremos rumbo al futuro que queremos.
Como en cualquier partido, los procesos congresuales son espacios que tienen que enfocarse hacia la apertura, la inclusión y el crecimiento. Pero este proceso adquiere un valor especial cuando tomas la decisión de abrir las puertas de casa no solo a tu militancia, sino también a todas aquellas personas que comparten contigo los mismos valores y que creen honestamente que el proyecto en el que estamos, el Bloc, y por tanto Compromís, son la herramienta necesaria para consolidar un espacio real de transformación en el País Valenciano. En el Bloc, amigas, estamos abiertas por reformas. De obras por ampliación.
En diciembre, las consejeras y los consejeros nacionales eligieron la Comisión Organizadora del Congreso (COC) con un mandato muy claro para todas y todos los miembros: tenía que ser un Congreso de apertura. Así las cosas, la COC tenemos el mandato de comenzar un proceso limpio, transparente y participativo, donde tenga prioridad el diálogo para conducirnos hacia un Congreso de todas y todos. Donde quepa toda aquella gente que se ha hartado de la mediocridad, de esa vieja política envuelta en celofán que ni escucha ni quiere escuchar, que se ahoga en su propio sudor de los intereses personales... Abrir el Bloc y Compromís a la gente que todavía cree que las cosas pueden tener remedio, quiere decir crecer de manera sólida e inexorable.
Hacerse mayor implica también aprender a incorporar estrategias a largo plazo, a hacer las cosas como toca y cuando toca, con orden, a construir con solidez el proyecto. Y esto se hace comenzando procesos como en el que estamos ahora, basados en el convencimiento de que la realidad está formada por la convivencia de muchas realidades.
Hacerse mayor, crecer, supone también el ejercicio de mirarse al espejo y reconocer ante nuestra imagen todo aquello que tanta gente ha hecho por esta tierra antes de nosotros. El reto no es poca cosa, no vamos solo a recoger los frutos de árboles anteriormente plantados, sino a preparar nueva tierra para cultivo, para impedir que los buitres de ahora y de siempre nos la inunden nuevamente de su inmundicia.
Lo haremos desde el valencianismo. Y no queremos hacerlo a solas. Lo queremos hacer con la gente que se siente igual, con personas que buscan espacios a los que pertenecer y en los que participar, que se les escuche y donde sean realmente el eje central de todas las propuestas. Hacer lo contrario ni va ni irá conmigo, ni con el Bloc, ni con Compromís.
La diversidad, entendida en toda su amplitud personal, social y lingüística, así como el respeto que manifestamos hacia ella; la permeabilidad hacia las opiniones de los otros y otras, la libertad, el feminismo, el compromiso con las personas y con el territorio que habitamos, conformarán la base del proyecto que todas y todos queremos. Un proyecto por el que, no tengáis ninguna duda, nos vamos a dejar la piel.
Elena López Blat es presidenta de la Comisión Organizadora del Congreso del Bloc.