El presidente del Gobierno valenciano, Ximo Puig, mueve fichas a escasos dos meses de las elecciones. El pleno del Consell aprueba este viernes el cese del hasta ahora presidente de la Autoridad Portuaria de Valencia (APV), Aurelio Martínez.
Su puesto lo cubrirá el hasta ahora Secretario autonómico para la Unión Europea y Relaciones Externas, Joan Calabuig, persona de la máxima confianza del presidente, según ha adelantado Radio Valencia Cadena SER y han confirmado a elDiario.es fuentes de la administración autonómica.
De esta forma, la vacante de Calabuig la ocupará ahora Carolina Punset, quien ejercía de Comisionada para Asuntos Europeos e Iniciativas Estratégicas.
Martínez tomó posesión del cargo como presidente de la APV en agosto de 2015 por designación de Ximo Puig tras el polémico proceso de venta del Valencia CF en el que apostó decididamente por el magnate Peter Lim, aspecto por el que fue juzgado recietemente.
Como responsable del Puerto se ha visto envuelto en numerosos problemas para sacar adelante la ampliación norte con un proyecto modificado en 2018, negándose a tramitar una nueva declaración de impacto ambiental (DIA) que sustituyera a la de 2007.
La validez esta DIA ha sido cuestionada por la Demarcación de Costas, por el Defensor del Pueblo, por el comité de científicos del Parque Natural de la Albufera y en lo relativo a quién debe tener la condición de órgano sustantivo está suspendida cautelarmente por el Tribunal Superior de Justicia de Madrid. Además, la Abogacía del Estado y la Intervención tumbaron la permuta una concesiones que beneficiaba al naviero Vicente Boluda, consejero de la propia APV.
La aprobación del nuevo proyecto de ampliación con la DIA de 2007 se encuentra atascada en el consejo de ministros desde hace tres meses.
Tampoco logró sacar adelante la Zona de Actividades Logísticas (ZAL) del Puerto de València, paralizada una vez más por una sentencia del Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana (TSJCV).
En los últimos meses, ademas, Martínez abrió una guerra con la ciudad de València a cuenta de la gestión de la Marina, cuyos espacios cedidos a la ciudad pretendía recuperar de nuevo.