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El ex senador y teniente de alcalde de Oviedo, condenado a un año de cárcel por difundir emails de la Sindicatura
Asturias —
El ex senador por el PP y ahora primer teniente alcalde del Ayuntamiento de Oviedo, Jaime Reinares, ha sido condenado a un año de cárcel, inhabilitado para el derecho de sufragio pasivo durante el tiempo de la condena y al pago de una multa de 9.600 euros por un delito de revelación de secretos y violación de la intimidad, al difundir, en rueda de prensa, 54 correos electrónicos, extraídos por un anónimo, de la cuenta personal de la que había sido secretaria de la Sindicatura de Cuentas, Rosa Zapico, militante socialista.
El magistrado de la sala de lo Penal de Oviedo considera que el dirigente popular ha incurrido en un delito de revelación de secretos al hacer públicos los emails, que recibió de un anónimo, que firmó con el nombre de ‘Voxpopuli’ y que, a día de hoy, todavía no ha sido identificado.
El caso del primer teniente de alcalde de Oviedo tiene todos los ingredientes de una historia de espionaje e intriga. Los correos que dio a conocer el dirigente popular incluían documentación relacionada con la fiscalización que la Sindicatura de Cuentas había realizado sobre la expropiación de la finca y palacete ‘Villa Magdalena’, que a su vez había sido remitida al fiscal del Tribunal de Cuentas.
Según Reinares, los correos encerraban una trama contra el PP urdida por el PSOE de cara a las elecciones de mayo de 2011, determinados elementos de la Sindicatura y del Tribunal de Cuentas para “castigar al Ayuntamiento de Oviedo” a costa del polémico caso de 'Villa Magdalena'. Por eso decidió hacerlos público y de hecho, en todo el proceso, nunca ha mostrado arrepentimiento: “Lo volvería hacer”.
Uno de los correos remitidos por la ex secretaria de la Sindicatura al fiscal del Tribunal de Cuentas dice: “Te envío borrador del asunto de la deuda derivada de la expropiación de Villa Magdalena”. Esta parcela lleva metida en un laberinto judicial desde 1997 y, desde entonces, el Ayuntamiento de Oviedo no ha logrado mitigar los problemas que ha causado; un dolor de cabeza municipal que cuesta más de 62 millones de euros, según la tasación de la constructora Comamsa, antigua propietaria de la finca.
Todo el argumento, de que había dado a conocer los correos de la cuenta personal de la ex secretaria de la Sindicatura para defender a las instituciones que representaba, el Ayuntamiento y el Congreso de los Diputados, y para destapar una trama que se estaba urdiendo de cara las elecciones de mayo de 2011, no le han servido de mucho.
El juez ha considerado que el contenido de los emails “era información privada y secreta”, en los que no se trataban cuestiones de carácter público, tal como sostuvo en todo momento el dirigente popular. Además, asegura que Reinares conocía la procedencia ilícita de los correos electrónicos, ya que el confidente anónimo advertía en la carta que encabezaba la relación de emails, que la información se había obtenido sin el consentimiento de la ex secretaria de la Sindicatura.
Por el delito la revelación de secretos y violación de la intimidad, además de la condena de un año, tendrá que pagar una multa de 3.600 euros, una indemnización de 6.000 euros “por daños morales” a la víctima, Rosa Zapico, y afrontar las costas judiciales.
La acusación califica la sentencia de “benévola” con el dirigente popular, pero a la vez está satisfecha, porque el juez reconoce el principal delito del que se acusaba a Reinares.
