Reservas de área que Brasil licitará pueden sumar 42.000 millones de barriles

Las reservas en Libra, el área en aguas muy profundas que Brasil escogió para su primera subasta de licencias para explotar petróleo y gas en el presal, pueden ubicarse entre 26.000 y 42.000 millones de barriles in situ, es decir sin garantía total de extracción, informaron hoy fuentes oficiales.

“Se trata del mayor descubrimiento que hemos hecho hasta el momento. Es singular. Inimaginable”, afirmó la directora general de la Agencia Nacional del Petróleo (ANP), Magda Chambriard, en la rueda de prensa en la que citó los resultados de los últimos estudios realizados en dicha área del presal.

“Con los datos que tenemos hasta el momento, calculamos que el volumen está más cerca de los 42.000 millones que de los 26.000 millones de barriles”, agregó la funcionaria, quien aclaró que el volumen efectivamente extraíble puede ubicarse entre 8.000 y 12.000 millones de barriles, ya que por lo general corresponde al 30 % de las reservas in situ.

En el peor de los casos, las reservas extraíbles en Libra superarían la mitad de las actuales reservas probadas de Brasil (14.000 millones de barriles), según los cálculos de la ANP.

El campo de Libra está ubicado en la cuenca marina de Santos, a unos 183 kilómetros del litoral del estado de Río de Janeiro y en una región del Atlántico en que las profundidades varían entre 1.700 y 2.400 metros.

La directora admitió que, ante los resultados de los últimos sondeos exploratorios en Libra, el Gobierno decidió anticipar de noviembre a octubre su primera subasta de licencias para explotar el presal, las gigantescas reservas en aguas muy profundas del Atlántico.

Será la primera subasta desde que, en 2009, el Gobierno reformó su régimen petrolero y adoptó exclusivamente para el presal el llamado “Régimen de División de la Producción”.

Este régimen busca garantizarle una mayor renta al Estado con el presal, el horizonte de exploración descubierto por debajo de una capa de sal de dos kilómetros de espesor y que puede convertir a Brasil en uno de los mayores exportadores mundiales de petróleo.

El nuevo régimen prevé que la petrolera estatal brasileña Petrobras será el operador en todas las licencias y que tendrá una participación de al menos un 30 % en los consorcios que exploten el presal.

Igualmente establece que las reservas descubiertas son propiedad del Estado y que las licencias serán otorgadas a los consorcios que acepten compartir el mayor volumen de la producción con el Estado.

La directora de la ANP relató que los nuevos cálculos de reservas para el campo de Libra “deslumbraron” a los miembros del Gobierno que participaron en una reunión el miércoles en Brasilia para definir la subasta de licencias, incluyendo a la presidenta Dilma Rousseff.

“Nos reunimos con la presidenta Dilma (Rousseff) y le mostramos que Libra era la mejor oportunidad para realizar la primera subasta en el presal. Concluimos que no podíamos esperar tanto (hasta noviembre) para la subasta”, aseguró.

El Gobierno también decidió anticipar la subasta tras el éxito que cosechó este mes en una ronda para otorgar licencias para explorar bloques terrestres y marinos en áreas no tan prometedoras.

En la subasta realizada la semana pasada fueron concedidas licencias a 30 empresas, entre las cuales 18 extranjeras, para explotar 142 bloques en áreas que no incluían ni el presal ni las grandes cuencas marinas en las que Brasil extrae más del 90 por ciento de su petróleo.

La ANP recaudó un récord de 2.800 millones de reales (unos 1.400 millones de dólares) con la subasta de concesiones de la semana pasada.