Has elegido la edición de . Verás las noticias de esta portada en el módulo de ediciones locales de la home de elDiario.es.
Noticia de agencia

Noticia servida automáticamente por la Agencia EFE

Esta información es un teletipo de la Agencia EFE y se publica en nuestra web de manera automática como parte del servicio que nos ofrece esta agencia de noticias. No ha sido editado ni titulado por un periodista de eldiario.es.

Buenos Aires no logra el apoyo de los acreedores pero cede para evitar el cese de pagos

Personas caminan frente al Banco Central de la República Argentina, este martes, en Buenos Aires (Argentina).

EFE

Buenos Aires —

0

El Gobierno de la provincia de Buenos Aires, la más rica de Argentina, reconoció este martes que no consiguió postergar el vencimiento de un bono de deuda, en medio de la crisis económica que sufre el distrito y el país, pero afirmó que finalmente afrontará el pago para evitar caer en un 'default'.

El Ejecutivo bonaerense -que desde diciembre pasado encabeza el peronista Axel Kicillof- resolvió afrontar el vencimiento, de 250 millones de dólares, usando recursos propios recaudados en los últimos días mediante colocación de deuda en el mercado local, sin necesidad de la asistencia del Gobierno nacional.

Además, el propio gobernador anunció en una rueda de prensa en La Plata, capital provincial, el inicio del proceso de reestructuración de la deuda en moneda extranjera y criticó duramente al grupo de bonistas que no aceptaron la propuesta de postergar el pago.

“Estamos denunciado esta actitud, la estamos repudiando, actuamos de buena fe y lo estamos haciendo con total responsabilidad con respecto a los efectos que puede tener esto sobre la provincia de Buenos Aires y obviamente también sobre la República Argentina”, expresó Kicillof.

Esta situación cobra fuerte trascendencia mientras el presidente argentino, Alberto Fernández, correligionario de Kicillof, desarrolla un viaje por Europa -hoy se reunió con el rey Felipe de España y el presidente del Gobierno Pedro Sánchez- para recabar apoyos políticos que permitan abordar la alta deuda externa del país.

El 14 de enero pasado, el Ejecutivo bonaerense pidió a los tenedores del bono BP21, emitido en 2011 por un monto total de 750 millones de dólares y a una tasa de interés fija anual de 10,875 %, su consentimiento para postergar del 26 de enero al 1 de mayo el pago de uno de los vencimientos, por 250 millones.

La petición no implicaba ni una quita ni una reestructuración ni un descenso de los intereses.

Teniendo en cuenta el periodo de gracia adicional de 10 días que establecen las cláusulas del contrato del bono para el pago de capital, sin llegar a incurrir en un incumplimiento, la provincia tenía como plazo hasta este miércoles para pagar.

Pero tras varias jornadas de incertidumbre por la negociación con los acreedores, en las que el propio Gobierno llegó a proponer pagar el 30 % del capital que venció y postergó en varias oportunidades la fecha límite para lograr un acuerdo, algo más del 50 % aceptaron diferir el pago, pero se necesitaba el consentimiento de al menos el 75 %.

“Hubo un fondo de inversión que dice tener el 25 % (del bono) o más, es decir, la capacidad de bloquear. (...) No tuvo esa misma actitud constructiva y de diálogo (...) y ofrecía cobrar todo pero en cuotas, y eso no constituye una solución para la provincia”, subrayó Kicillof, que fue ministro de Economía del Gobierno de Cristina Fernández de Kirchner -actual vicepresidenta- entre 2013 y 2015.

Hasta el último momento, continuó el gobernador, se trató de alcanzar un acuerdo “con la máxima voluntad posible”, pero el 26 de enero ya se sabía que no había “buena predisposición” y sí una “enorme intransigencia” de ese fondo.

Es así que para evitar el cese de pagos de la provincia, que aglutina a alrededor de 15 de lo 45 millones de habitantes del país y cuya economía caía al 1,9 % interanual en el tercer trimestre de 2019, el Gobierno provincial tomó la decisión de pagar.

Kicillof comenzó su discurso de este martes ante la prensa apuntando duramente contra la gestión del conservador Mauricio Macri (2015-2019) -durante la que se inició una recesión en abril de 2018 que aún continúa- y la que fue su gobernadora en Buenos Aires, María Eugenia Vidal.

A ambos los acusó de haber endeudado al país y a la provincia “en un grado que es absolutamente insostenible”, y en concreto dijo que el anterior Ejecutivo provincial dejó una deuda de 11.300 millones de dólares.

Al tiempo que la provincia trata de solucionar sus problemas, Argentina busca afianzar un proceso de negociación del pago de su deuda pública, que entre 2015 y 2019 pasó de 240.000 millones de dólares a 314.000, según los datos proporcionados por el Ejecutivo de Macri al final de su mandato.

La deuda externa a valor nominal se ubicaba, en el tercer trimestre del año pasado en 276.686 millones, entre ellos los más de 44.000 ya recibidos por el rescate de 56.300 que concedió al país el Fondo Monetario Internacional (FMI).

Hace unas semanas, el ministro de Economía nacional, Martín Guzmán, ya había anticipado que el Gobierno central no saldría en auxilio de la provincia de Buenos Aires, pero reconoció que un eventual 'default' o cese de pagos generaría “ruido” en las negociaciones por la deuda nacional y pidió “una solución ordenada”.

A su llegada al poder hace casi dos meses, Alberto Fernández reiteró que el país -cuya recesión está acompañada de una alta inflación y problemas de devaluación- tiene voluntad de pagar, pero insiste en que, para ello, es necesario que la economía vuelva a crecer.

Con la vista puesta en recabar apoyos de cara a la negociación de la deuda, en especial la del FMI, el presidente hizo este martes en España una nueva parada de la gira que inició en Europa hace una semana, y que ya le ha llevado a reunirse, además de con el rey y Sánchez, con el papa Francisco, con el presidente y el primer ministro de Italia, Sergio Mattarella y Giuseppe Conte, respectivamente, y con la canciller alemana, Angela Merkel.

El miércoles culminará su viaje en París, donde se verá con su par francés, Emmanuel Macron.

Rodrigo García

Etiquetas
stats