Extremadura ganó su propio debate metiendo el tema del tren

Extremadura estuvo más presente que nunca en el debate electoral que la pasada noche mantuvieron  en televisión los cinco principales candidatos, y consiguió meter uno de sus problemas, la falta de un buen servicio ferroviario, en las intervenciones de tres de los cinco, además de ser mencionada como ejemplo de la España despoblada que saldría perdiendo con la reforma electoral que plantea Ciudadanos.

La discusión, cuando se enfocó desde los presentadores al asunto de la cohesión territorial, se metió en los vericuetos de Cataluña y ahí se envolvieron todos –Pedro Sánchez, Pablo Casado, Albert Rivera y Santiago Abascal- hasta que Pablo Iglesias cambió de tercio por completo y dijo que hay otro problema territorial del que no hablan políticos ni periodistas, y es el de la España secundaria, la del despoblamiento, y su falta de servicios básicos.

Estábamos en el minuto 31.04 de un debate que duró casi tres horas, cuando el líder de Podemos mencionó a “la gente que nos está viendo desde Extremadura” y “no llega un tren a su tierra”.

Una hora después Albert Rivera, el del trozo de acerado seguramente mal llamado adoquín, le plantó a Sánchez un mapa de España y le preguntó que cuántas naciones veía en él. Iban transcurridos 1 hora, 30 minutos y 58 segundos cuando el líder de Ciudadanos se respondió él mismo que España no es una nación de naciones, sino una nación de ciudadanos, “y me da igual que vivan  en Barcelona, Cádiz, Extremadura o en Almería”, para reprochar a continuación los pactos del PSC en la Diputación de Barcelona con los nacionalistas, y las andanzas de los “cachorros” de estos últimos.

Unos “cachorros” que paralizan las estaciones y los AVE “porque hay AVE, porque en Extremadura no hay AVE, en Almería no hay AVE…”.

El problema ya conocido en España como “el tren de Extremadura” se colaba así por segunda vez y con más intensidad en un debate con millones de seguidores, junto a otros territorios desfavorecidos y presuntamente perjudicados por la atención excesiva a los catalanes.

La tercera y última alusión al ferrocarril regional llegó casi al final, a las 2 horas, 55 minutos y 35 segundos cuando el presidente del PP, Pablo Casado, reivindicó la llegada del AVE a “Extremadura, País Vasco y Murcia”, que según él los socialistas “lo han paralizado”. Un tren de alta velocidad que, hay que recordar, en la anterior campaña electoral el mismo Casado, en un mitin en Mérida, propuso que solo parara en esa ciudad para que tardara menos, con las consiguientes críticas desde el resto de ciudades.

Badajoz y el jamón

Por su parte Pedro Sánchez hizo anoche durante el debate una alusión a la Comunidad cuando rebatió la propuesta de reforma electoral planteada por Albert Rivera, que según el presidente del Gobierno en funciones dejaría sin representación política, sin diputados en las Cortes, a la “España despoblada”, y como ejemplo puso a provincias como León, Valladolid, Coruña o Badajoz“.

Eso ocurría a las 2 horas, 1 minuto y 8 segundos desde el comienzo de la discusión a cinco.

Un Sánchez que tuvo que aguantar la sorna del error que cometió en la pasada feria de Zafra al hablar del jamón ibérico como serrano, y que le recordaba Albert Rivera en un pasaje del debate sobre la libertad de comercio, proteccionismo, y exportaciones, en el momento que ya llevaban hablando 2 horas, 49 minutos y 53 segundos.