La Iglesia vasca archiva una denuncia por abusos sexuales porque había prescrito
El Tribunal Eclesiástico encargado de una investigación interna sobre una denuncia de abusos sexuales decidió archivar el caso porque los hechos habían prescrito, según ha publicado elmundo.es.
Los abusos denunciados se remontan al año 1983 y el acusado es un fraile dominico que ejercía en la parroquia de Los Ángeles de Vitoria. La víctima, un niño, que ya de adulto se puso en contacto en enero del 2010 con el prior de los dominicos en España, fray Francisco Javier Carballo para ponerle en conocimiento de la ocurrido. A esa orden pertenece el fraile denunciado. El propio responsable de la orden le invitó a que formulara la denuncia concretando los hechos y la persona responsable de los abusos sexuales y le dijo que la Iglesia actuaría siguiendo la normativa canónica vigente.
La víctima acudió después al Obispado de Vitoria, dirigido entonces por el ahora Obispo de Vitoria, monseñor Miguel Asurmendi, y presentó de forma oficial la denuncia contra el fraile dominico. Ratificó que había sido víctima de abusos sexuales en 1983 e hizo al mismo tiempo otra queja hacia un segundo religioso, en este caso, el párroco de la Iglesia, al que acusó de minimizar los abusos al responderle, tras relatarle personalmente lo ocurrido, que “dejará de decir tonterías”.
La investigación previa activada tras la presentación de la denuncia concluyó que los hechos denunciados no eran objeto de juicio canónico al haber prescrito hacía ya 12 años, en 1995 y la investigación quedó aparcada. Se realizaron las pertinentes entrevistas al fraile denunciado y a otras personas implicadas y se reunió a una comisión asesora sobre la materia integrada por dos frailes, una psicóloga y una abogada. Descubrieron, según los Dominicos, algunas incoherencias en la declaración del denunciado, un baile de fechas en su relato.
La orden, asimismo, ha salido en defensa del párroco de Los Ángeles a quien la víctima acusó de minimizar los abusos. Han destacado su larga trayectoria y entrega, un 'buen pastor' que “da la vida por los suyos y que garantiza la protección de los más débiles e indefensos”, según refleja la información de elmundo.es.
