Una exposición muestra en Don Benito la vida de los ganaderos trashumantes en Extremadura
Llegados desde León o Segovia hasta Extremadura los pastores dejaron un legado de piezas que regalaban a sus familias a la vuelta de sus viajes o en sus llegadas, además de “verdaderas” muestras de amor que ofrecían a sus novias.
Una exposición sobre la trashumancia muestra a través de 14 paneles y diversos objetos la vida de los ganaderos extremeños en la alta Edad Media.
Tras pasar por ciudades como Zafra y Cáceres, y la Asamblea de Extremadura llega ahora a Don Benito para dar a conocer los objetos que utilizaban los pastores de la época, así como diferentes piezas talladas y manufacturadas como un homenaje a la cultura pastoril y lo que esta significó para Extremadura.
La exposición se titula “Trashumar. Oveja que anda... bocado halla” se encuentra en el Museo Etnográfico dombenitense. Las piezas proceden del Centro de Estudios Agrarios, el Museo Etnográfico de Don Benito y el Museo Etnográfico de Olivenza, que recogen el patrimonio generado alrededor de las vías pecuarias de la región, en concreto más de 7.500 kilómetros de cañadas, cordeles o coladas.
El jefe de sección del Centro de Estudios Agrarios de la Junta, José Luis Mosquera, destaca que la muestra explica lo que fue la trashumancia, una cultura propia que abarca ámbitos muy diversos, desde la gastronomía hasta las devociones, pasando por un vocabulario “específico” y una arquitectura “singular” dominada por la “sencillez y la funcionalidad”.
Con esta muestra la Junta de Extremadura pretende poner en valor bienes de dominio público conservador por el Gobierno regional como una de las “mejores” formas de disfrutar del entorno de la región y vivir la “irrepetible ” experiencia de trashumar.