La TVG ha cerrado la temporada televisiva 2024-25 con una caída de audiencia del 0,9%, la mayor del conjunto de televisiones autonómicas, lo que ha provocado que, tras tres cursos como la tercera cadena más vista de la FORTA haya cedido el puesto a Canal Sur, que ha registrado una subida equivalente. El promedio de share de estos 9 meses, un 8,6%, es idéntico al del año natural de 2024, el más bajo en la historia del canal. La corporación ha evitado valorar los resultados porque considera que la temporada no acaba hasta que finalice el mes.
Según los datos de los audímetros de Kantar Media, TV3 sigue siendo la televisión autonómica más vista y una ligera subida de dos décimas le permite alcanzar el 14,1% de share. Le sigue Aragón TV (12,1), que aumenta medio punto y sigue rompiendo sus propias marcas. Tras ellas, Canal Sur gana ocho décimas —el mayor crecimiento de la temporada— y escala hasta el tercer puesto (9,4) que intercambia con TVG y su 8,6 tras perder casi un punto. El quinto lugar, clavando las cifras de la temporada anterior, es para ETB2 (8,3% de audiencia), pero —al igual que aragoneses y catalanes— líder en su territorio en una faceta clave: los informativos.
Casi uno de cada cuatro espectadores se informan a través de su televisión autonómica en Aragón (23,1%) y Catalunya (23%). Uno de cada cinco (19,7%) lo hacen en Euskadi. En Galicia, el liderazgo en las noticias, tanto en la edición de la tarde como en la de la noche, vuelve a ser otra temporada más para Antena 3. La media de TVG se queda en el 11,9%, aunque son dos décimas más que en el balance del año natural, donde era del 11,7%. Canal Sur (10,9%) todavía está un punto por debajo.
Remontar estas cifras es uno de los desafíos de la próxima directora xeral de la CRTVG —que pasará a llamarse CSAG en virtud de la nueva ley de medios públicos—, Concepción Pombo, que durante los últimos siete ha sido, precisamente, la responsable de informativos de la corporación. La primera votación para colocarla en el lugar de Alfonso Sánchez Izquierdo, el único responsable que los medios públicos gallegos han tenido desde que el PP recuperó la Xunta en 2009, fue negativa, ya que no consiguió el respaldo de los dos tercios del Parlamento. Tampoco se espera que lo haga a la segunda, cuando hará falta una mayoría cualificada de tres quintos.
Sin embargo, el nuevo texto legislativo ha dejado amarrado el nombramiento a dedo de Pombo, considerada la principal responsable de la manipulación informativa denunciada por el movimiento Defende a Galega, el comité intercentros o la oposición, y una de las razones que todos ellos aducen para explicar la fuga de espectadores, especialmente de los espacios de noticias. La nueva norma recoge una tercera votación en la Cámara en la que será suficiente la mayoría absoluta de la que goza el PP y que ya utilizó para aprobar ese texto en solitario. Por tanto, la confirmación del relevo es sólo cuestión de días. Para bien o para mal, su llegada y su sello propio deberían notarse en el balance de la próxima temporada.