El príncipe Andrés de Inglaterra deja la vida pública tras su vinculación con la red de explotación sexual de Epstein
El príncipe Andrés de Inglaterra ha anunciado que abandona sus “funciones públicas” tras verse involucrado en el escándalo por sus vínculos con el magnate estadounidense Jeffrey Epstein, quien fue hallado ahorcado en agosto de este año en una celda de la prisión donde cumplía condena acusado de tráfico sexual de menores.
El hijo de la reina Isabel II, de 59 años, ha informado a través de un comunicado que ha solicitado a la monarca dar un “paso atrás en sus deberes públicos” de forma provisional, debido a que sus circunstancias personales han supuesto un “importante trastorno” para la Familia Real Británica.
“Su suicidio (de Epstein) ha dejado muchas preguntas sin responder, particularmente para sus víctimas. Compadezco profundamente a todos los que se han visto afectados y quieren que todo esto termine de alguna forma”, ha afirmado el príncipe en el comunicado. “Solo puedo esperar que, con el tiempo, sean capaces de reconstruir sus vidas. Por supuesto, estoy dispuesto a colaborar con cualquier autoridad judicial apropiada”, ha añadido.
El anuncio llega después que el príncipe Andrés negara “categóricamente” durante una entrevista en la cadena británica BBC el pasado domingo haber mantenido relaciones sexuales con Virginia Giuffre, la mujer estadounidense que aseguró haber sido forzada por el príncipe entre los años 2001 y 2002.
Giuffre, una de las 30 mujeres que declararon haber sido víctimas de los abusos de Epstein, aseguró en una entrevista con la cadena estadounidense NBC haber mantenido relaciones íntimas con el príncipe en hasta tres ocasiones cuando ella tenía 17 años, concretando incluso que una de ellas tuvo lugar en Londres en marzo de 2001.
Ante las preguntas de la periodista Emily Maitlis, el hijo de la reina declaró no acordarse de “haber conocido alguna vez a esta señora”. Una versión que contrasta con una imágenes divulgadas en las que se podía ver al duque con la mano en la cintura de Giuffre, cuya falsedad fue descartada tras realizar las pruebas pertinentes, tal y como reconoció el propio príncipe Andrés durante la entrevista.
Con la opinión pública en su contra, la situación del príncipe se volvió insostenible después de que el grupo de telecomunicaciones BT informara tras dicha entrevista que dejará de trabajar con una organización dedicada al desarrollo digital mientras el hijo de Isabel II sea su patrón. El anuncio de BT se sumaba a la pérdida de apoyo de empresas, organismos y universidades que en los últimos días se han ido distanciado del príncipe.
El anuncio de la renuncia del príncipe llega tan solo un día después del arresto de los dos guardias encargados de vigilar la celda donde se suicidó el pasado agosto el millonario Jeffrey Epstein en circunstancias irregulares que aun se encuentran bajo investigación.