Ponen a subasta las cenizas del escritor Truman Capote: “A él le encantaría”
Truman Capote está a punto de tener su último y macabro momento de fama. Sus cenizas serán subastadas en Los Ángeles, con un precio de salida de 2.000 dólares (unos 1.800 euros). Contenidas en una caja tallada japonesa, se podrá pujar por ellas en septiembre, 32 años después de la muerte de Capote.
Si al autor de A sangre fría le parecería bien que vendan sus restos de esta manera es una pregunta abierta, pero el hombre que las ha puesto en venta no tiene dudas. “Con algunos famosos esto sería de mal gusto, pero estoy 100% seguro de que a él le encantaría”, asegura a the Guardian el presidente de Julien's Auctions, Darren Julien. “Le encantaba generar oportunidades de salir en la prensa y leer su nombre en el periódico. Creo que le encantaría seguir acaparando portadas hoy en día”.
Las cenizas forman parte del legado de Joanne Carson, la difunta esposa del antiguo presentador del programa de televisión Tonight Show, Johnny Carson. La mujer, que murió el año pasado, era una amiga íntima de Capote y lo acogió en su mansión de Bel-Air, donde este murió de una enfermedad del hígado en 1984, a los 59 años.
Los responsables del cumplimiento del testamento no estaban seguros de qué hacer con los restos, pero tras un debate ético decidieron incluirlos en la subasta del 24 de septiembre, según explica Julien.
“En este caso es absolutamente correcto porque representa realmente lo que era Truman Capote y lo que le encantaba hacer”, argumenta Julien. “Truman le dijo a Joanne que no quería que sus cenizas estuvieran puestas en una estantería. Así que esta es una forma diferente de hacer honor a su petición. No es más que continuar con las aventuras de Truman Capote”.
Es poco probable que incluso la mente que está detrás de Desayuno con diamantes y la novela de no ficción pudiera haber adivinado que acabaría convertido en el lote 517 –precio de salida: 2.000 dólares; precio estimado: entre 4.000 y 6.000 dólares– en una casa de subastas situada en el número 3327 de La Cienega Place, encajada entre un Food Express y una tienda Five Four Clothing.
Julien dice que, hasta donde él sabe, es la primera vez que se subastan cenizas humanas. “Nunca antes se ha hecho”. La comparación más cercana que se le ocurre al subastador es la venta del pene y de una piedra del riñón de Napoleón, que pertenecían al actor William Shatner. Recaudó 75.000 dólares en 2006, que fueron a parar a una ONG.
Explica que los fans y coleccionistas de Capote habían expresado interés en sus restos y vaticina que se venderán a un precio “mucho mayor” de los 6.000 dólares. “Si hay algo con Truman Capote es que es muy coleccionable. La gente colecciona porque les gusta presumir de las cosas. O formar parte de las conversaciones. Este es el gran tema de conversación”.
Capote, nacido en Louisiana, empezó a escribir ficción a los 11 años y comenzó a trabajar de ayudante en la revista New Yorker. A sangre fría, su crónica real sobre el asesinato de la familia Clutter en Kansas, publicada en 1966, marcó un hito literario que lo catapultó a la fama y el prestigio.
Sus críticos, sin embargo, acusaron al autor de querer que ejecutaran a los asesinos, Perry Smith y Richard Hickock, para aumentar la influencia del libro. Capote nunca repitió la relevancia literaria del libro, pero mantuvo un perfil alto a través de las relaciones públicas, las apariciones en televisión y los cotilleos alegres.
Tras su incineración, los restos se mantuvieron en la habitación en la que murió. Los ladrones los robaron supuestamente dos veces, pero en ambas ocasiones fueron recuperados. Los productores de la versión de Broadway de Desayuno con diamantes invitaron a las cenizas a la gala de estreno en 2013, pero Carson, por miedo a otro susto, las mantuvo en Bel-Air.
Julien afirma que, con el comprador adecuado, Capote podría encontrarse de vuelta en su querido Manhattan: “Ojalá sea un comprador de Nueva York, para que pueda volver a casa. O alguien que viaje mucho y se lo pueda llevar con él”.
Traducción de Jaime Sevilla Lorenzo