Así ha amanecido Logroño tras los disturbios
Incredulidad e indignación. Así ha amanecido Logroño después de los violentos disturbios que tuvieron lugar este sábado por la noche en la capital. La mañana de este domingo ha servido para hacer balance de daños materiales y también para recomponer el ánimo de una sociedad aturdida por lo sucedido, pero convencida de que estos actos no pueden quedar impunes.
En la tienda de Lacoste que fue destrozada y saqueada por los grupos de radicales, familiares y amigos han ayudado a colocar como han podido las prendas y demás objetos afectados.
Mientras, la propietaria ha acudido a comisaría para completar las diligencias. Un guarda de seguridad custodia el establecimiento tras la rotura del escaparate y muchos vecinos se han acercado al lugar a trasmitir su solidaridad a los afectados.
También algunos curiosos, como un joven que ha reiterado varias veces a los presentes que él estuvo en la manifestación, pero que no tuvo nada que ver con los disturbios.
En Vara de Rey, las Cien Tiendas y El Espolón apenas quedan restos de la batalla campal. El servicio municipal de limpieza se ha afanado para que así sea, reforzando el servicio hasta bien entrada la madrugada, para continuar a primera hora de este domingo.
Los violentos incendiaron al menos cinco contenedores (cada uno de ellos valorado en unos 1.200 euros) y han dejado pintadas, golpes y abolladuras en otros muchos.
Por fortuna, estos trabajadores han contado con la ayuda de un grupo de jóvenes que se han organizado para limpiar El Espolón y el parque del Ebro.
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