Así luce la Plaza de Mexico de Logroño siete meses después de su remodelación

Finales de enero de 2019. Hace algo menos de 7 meses, la entonces alcaldesa de Logroño, Cuca Gamarra, visitaba la nueva Plaza de México tras la remodelación integral en la que se invirtieron algo menos de un millón de euros. El día de su apertura al público, Gamarra aseguró que esta nueva zona de Logroño iba a proporcionar a Logroño “un parque singular que, con esta reforma, deja de ser un rincón escondido para abrirse a la ciudad y ser punto de encuentro de logroñeses de todas las edades”.

Siete meses después, este es el estado de algunos de los baldosines de las nueva plaza. Así se refleja en las imágenes que nos manda este lector de Rioja2 que lamenta que “la plaza nueva no dure ni meses”.

Una plaza accesible

El proyecto original de la Plaza de México sufrió pequeñas variaciones durante la obra para cohesionarlo con las obras de la glorieta de Vara de Rey, que incluyen la urbanización de la calle Hermanos Hircio, y con el desarrollo del PERI Ferrocarril, en las zonas aledañas a esta plaza. En la obra se desarrollaron caminos de conexión entre la plaza y las calles perimetrales, para que fuera más accesible para los peatones desde cualquiera de las calles adyacentes y tenga una mejor relación con el resto de la ciudad. También en su apertura al público, Gamarra recordó que esta remodelación es “una demanda histórica de los vecinos de la zona y un compromiso de esta alcaldesa que se ha hecho realidad”.