Barroso se queda al mando de la Comisión europea
Los jefes de Estado y de Gobierno de los Veintisiete han aceptado oficialmente renovar el mandato de José Manuel Durao Barroso al frente de la Unión Europea.
Los mandatarios europeos ya habían dado su respaldo político a Barroso por unanimidad en la cumbre celebrada los días 18 y 19 de junio, pero no formalizaron la decisión jurídica hasta ahora, con el fin de realizar consultas previas con el Parlamento europeo, que debe ratificar el nombramiento.
Se esperaba que la ratificación del portugués se votara en el pleno de la Eurocámara el próximo 15 de julio, así lo proponían los líderes de la UE, cuyo argumento se basaba en garantizar la estabilidad y evitar un vacío de poder en el Ejecutivo comunitario.
Sin embargo, el primer ministro sueco, Fredrik Reinfeldt, actual presidente de la UE, anunció la semana pasada que la votación se retrasará al menos hasta septiembre. Reinfeldt justificó la decisión por la falta de apoyo de algunos grupos políticos “importantes”, en referencia a los socialistas y los verdes, que han liderado la oposición a Barroso por considerarle un defensor de la desregulación que ha llevado a la crisis actual.
La conferencia de presidentes del Parlamento europeo -equivalente a la junta de portavoces del Congreso- decidirá este jueves los puntos del orden del día de la sesión inaugural del nuevo Parlamento surgido de las elecciones de junio. La sesión se celebrará la próxima semana y, salvo sorpresa, no se espera que la ratificación de Barroso se incluya en la agenda.
Barroso deberá declarar y exponer su orientación política en una sesión ante el Parlamento, después la Cámara tendrá que votar sobre si acepta o rechaza la candidatura propuesta, la votación requiere del apoyo de la mayoría de los parlamentarios.
La Comisión es el brazo ejecutivo de la Unión Europea, en ella están representados todos los estados miembro. Cada cinco años se designa a una nueva Comisión después de las elecciones al Parlamento.
Dentro de las funciones de la Comisión destacan: proponer legislación al Parlamento y al Consejo, gestionar y aplicar las políticas de la UE y el presupuesto, hacer cumplir la legislación europea (junto con el Tribunal de Justicia) y representar a la UE en los foros internacionales.
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