David Arteagoitia, ganador del V Premio Internacional de Grabado y Vino Bodegas Dinastía Vivanco

Con la entrega de los galardones del V Premio Internacional de Grabado y Vino Bodegas Dinastía Vivanco ha quedado inaugurada la muestra de 33 grabados seleccionados entres los 107 que se presentaron a este prestigioso concurso. Una muestra que recoge obras de una decena de nacionalidades puesto que, además de autores españoles, se exponen grabados de Rumanía, Cuba, EEUU, Méjico y Canadá.

Una muestra más especial que la de otros años. Y es que un lustro de existencia no se cumple todos los días. El certamen organizado por esta bodega riojana se ha convertido en un referente a nivel nacional e internacional, dentro del panorama artístico gracias a la proyección de piezas elaboradas con una técnica muy imaginativa y de increíble poder comunicativo, equiparable a la pintura o la escultura: el grabado.

Una inicitiva que, desde Bodegas Vivanco, se entiende como una manera de “apadrina sueños” ya que se da a conocer al gran público la labor de autores muy veteranos pero a la par desconocidos. “El grabado entrelaza hoy pasado y presente, une con creatividad técnicas antiguas y modernas”, aseguran desde Bodegas Vivanco.

David Arteagoitia García ha tenido el honor de convertirse en el ganador de la edición de este 2012 gracias a su 'Tierra roja', que le permitirá embolsarse los 3.000 euros del primer premio. La elección de la obra de este Doctor en Bellas Artes por la Universidad del País Vasco se produjo de entre los 107 candidatos que se habían presentando al certamen.

David Ortega del Campo se ha alzado con el segundo premio del concurso -dotado con 1.500 euros de premio- gracias a la obra titulada 'El espíritu del viento', una obra que le ha servido al autor para seguir experimentando con nuevos soportes, más versátiles en los que combina las técnicas digitales con la gráfica tradicional. Juan Lara, Elena Nieto e Igone Urquiza han recibido sendas menciones honoríicos por sus trabajos.

Todos los mencionados, además de ganar los correspondientes premios en metálico, tendrán el honor de poder ver sus creaciones dentro de la colección que Bodegas Dinastía Vivanco posee. Dentro de la misma, destacan algunas piezas de Picasso o Miró.

El vino, una experiencia universal

Observar los motivos, las texturas, el movimiento, la calma o un instante congelado en la plancha que ha dado lugar a cada obra hoy expuesta en el Museo de la Cultura del Vino Dinastía Vivanco, invita a reflexionar sobre el valor que cada artista, cada persona, concede al vino.

En el caso del ganador del V Premio Internacional de Grabado y Vino Bodegas Dinastía Vivanco, David Arteagoitia, “es un vínculo especial y cuasi universal con la tierra, una muestra de los beneficios que supone, una unión de respeto entre el hombre y el mundo que habita, una manera de entender las relaciones humanas…”, asegura.

Dentro de los rasgos que identifican a este concurso de grabado, y que lo han convertido en una referencia a nivel nacional, está el hecho de que gran parte de los autores presentan sus obras cada año, de forma que el jurado puede percatarse de sus evoluciones. Además, al certamen concurren varias generaciones de artistas, nacidos entre 1934 y 1991. Una heterogeneidad que también se percibe en las técnicas utilizadas (alcograbado, aguafuerte, collage, punta seca, china collé, xilografía, termograbado, etc.) y en la variedad de títulos, algunos tan sugerentes como Doble visión doble, La huella, La soirée del vino y otras conversaciones, Sobremesa o Del vino al amor.