“Desastre sin precedentes” para el turismo rural riojano
“Desastre sin precedentes”. Así califican la situación actual algunos de los propietarios de alojamientos rurales socios de ALTURA, Asociación de Turismo Rural de La Rioja, sobre las consecuencias inmediatas del efecto de la crisis del coronavirus “por la cancelación de las reservas para este mes de marzo y abril, sobre todo para la Semana Santa, fechas de máxima ocupación para el turismo rural”.
Explican desde la Asociación que las cancelaciones de reservas “afectan a todo tipo de alojamientos rurales, tanto hoteles y hostales como apartamentos turísticos, casas rurales y albergues o viviendas de uso turístico”.
“Algunos hablan de 50 habitaciones canceladas hasta hoy, o del puente de San José que era festivo en Valencia y todos los fines de semana del mes de marzo y abril. Y los pocos que todavía mantienen las reservas para Semana Santa se temen que sean canceladas en los próximos días”, añade.
Señalan que “la cancelación de reservas afecta también a restaurantes vinculados a los alojamientos y a las actividades de turismo activo, como el Parque de Aventura Sierra de Cameros, en Lumbreras”.
Las consecuencias de todo ello, según resaltan, son las “pérdidas económicas en plena temporada alta y los problemas laborales en la contratación de personal especializado por no poder garantizar la estabilidad de empleo”.
Desde la Asociación ALTURA, que incluye a unos 70 alojamientos rurales en La Rioja, “queremos plantear a la Dirección General de Turismo la necesidad de adoptar propuestas de tipo económico y estratégico que puedan compensar de alguna manera las pérdidas de negocio en los establecimientos de turismo rural en plena temporada alta de Semana Santa”.
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