El campo concentra los delitos contra los trabajadores

Operación Libertad. Un nombre que no pasará al olvido para los ciudadanos portugueses que se dedicaban a explotar a sus compatriotas en las campañas agrícolas riojanas el año pasado. Actualmente estos presuntos delincuentes están a la espera de un juicio en su país de origen que se celebrará en breve por un delito contra los derechos de los trabajadores.

Hoy, la Mesa de la Comisión sobre las campañas agrícolas, formada por la Delegación del Gobierno en La Rioja, agentes sociales y ONG`s han analizado la situación del campo riojano, el estado de los trabajadores y cómo asegurar los derechos a los trabajadores temporeros que llegarán a las campañas agrícolas de la región.

El asesor del Delegado, Gustavo Gauthier, ha afirmado que las Fuerzas de Seguridad velarán para asegurar los derechos a los trabajadores y garantizar la legalidad de los contratos. “La sensación de impunidad en el campo riojano para explotar trabajadores es menor, han descendido los delitos y por tanto, las denuncias” dice Gauthier, “pero el campo sigue siendo el primer lugar donde se producen más delitos contra los derechos de los trabajadores”.

El Fiscal Jefe de La Rioja se ha volcado, según el asesor del Delegado, en la lucha contra las mafias del campo, la mayoría portuguesas que se aprovechan de compatriotas con alguna minusvalía psíquica o que tienen problemas con las drogas para obligarles a trabajar de sol a sol sin apenas recibir un salario.

Gauthier ha recordado a los empresarios que tienen la obligación por convenio de alojar de una forma digna a sus trabajadores y que ya no tienen excusa para contratar de forma ilegal. El asesor sospecha que la futura campaña estará marcada por un excedente de mano de obra debido a la crisis económica que obligará a muchos riojanos desempleados a retornar al campo para la recogida de la fruta y para vendimias.

La Delegación del Gobierno no ha dado un número aproximado de personas que hacen falta esta año para realizar las labores y cómo se va a coordinar cuando lleguen los trabajadores inmigrante que el año pasado fueron contratados y tengan que convivir con los nuevos trabajadores españoles. Gauthier ha asegurado que los empresarios prefieren contratar a gente de aquí, conocidos o amigos, pero que a la Delegación sólo le corresponden las labores de inspección laboral y de vigilancia policial llegado el caso y que es responsabilidad del Gobierno de La Rioja lo demás.