La cocina y el baño, los peores lugares de la casa para guardar los medicamentos

El baño y la cocina son los lugares “típicos” de la casa en los que, frecuentemente, se guardan los medicamentos. Sin embargo, son “justo el sitio en los que la temperatura y la humedad no son las adecuadas”, tal y como ha advertido hoy el presidente del Colegio Oficial de Farmacéuticos de La Rioja, Mario Domínguez.

En rueda de prensa, Domínguez ha presentado la campaña 'Pon al día tu botiquín' con la que las 156 oficinas de farmacia de La Rioja repartirán material informativo y ofrecerán la posibilidad de reservar una cita para revisar el botiquín de casa, “ver qué hay, qué debería haber y dar unas pautas de conservación óptima”.

Según el Barómetro Sanitario publicado el pasado 27 de febrero por el Ministerio de Sanidad y realizado en colaboración con el CIS, para el que se han realizado casi 7.800 entrevistas a ciudadanos mayores de edad, el dieciséis por ciento de los encuestados afirma tener en sus hogares envases enteros de medicamentos recetados por su médico.

De los resultados del Barómetro publicados también se desprende que el 52,9 por ciento de esos envases son medicamentos que recetan por adelantando para que no les falten, mientras que el 31,6 manifiesta que son envases que han dejado sin usar porque cambiaron el tratamiento y para el 19,5 por ciento son medicamentos que decidió no tomar.

Domínguez ha insistido en que el medicamento “que ha valido una vez puede no ser válido para otra”. Además, los medicamentos tienen que guardarse “en sitios donde no estén sometidos a cambios de temperatura ni humedad, como puede ser un cajón discreto del salón o de una habitación”.

Un buen 'fondo de armario' para tener en casa estaría compuesto de material para pequeñas curas, antitérmicos (para la fiebre), antipiréticos (también para la fiebre), antiinflamatorios (para el dolor e inflamación) para dolencias menores y “es interesante tener un producto contra los piojos, porque se pueden descubrir en la ducha a deshoras”.

La Rioja cuenta con 156 oficinas de farmacia y 44 botiquines, lo que supone doscientos puntos de prestación farmacéutica, distribuidos a lo largo y ancho de La Rioja, con 56 farmacias en Logroño capital, y cien farmacias en el resto de La Rioja, además de 44 botiquines. Hay 63 municipios de La Rioja con una sola farmacia.