“En siete años vamos a tener la ciudad a pan y agua”

Ayer fue el grupo municipal socialista el que analizó la refinanciación de las obras del soterramiento. El portavoz municipal, Domingo Dorado, compareció junto con el concejal Vicente Urquía para explicar la postura del grupo. “Estamos ante un nuevo préstamo porque han cambiado las condiciones”, aseveró Dorado quien tachó de “incapaz e incompetente” a la alcaldesa de Logroño, Cuca Gamarra. Incapaz, dijo, “porque durante dos años las obras del soterramiento han estado paradas y, durante este tiempo, ha sido incapaz de preparar una refinanciación que no sea lesiva para la ciudad, la negociación ha sido nefasta porque solo salen ganando los bancos”.

En este sentido explicó que “la garantía del nuevo préstamo somos los ciudadanos de Logroño porque con esta refinanciación, el Ayuntamiento se ha comprometido a pagar una cantidad de dinero, como máximo 79 millones de euros, cifra que podrá disminuir en función de la venta de suelo”. De hecho así lo refleja el Informe del Interventor aportado por los socialistas. “La garantía de devolución del crédito no se constituye por los propios suelos, desvalorizados en estos momentos, sino que son los socios de la Sociedad del Ferrocarril quienes asumen un compromiso firme e irrevocable de aportar a dicha sociedad las cantidades necesarias para atender los pagos comprometidos con los bancos”.

Una venta del suelo que Urquía ve difícil. “Según las cifras aportadas por la alcaldesa, el metro cuadrado sin construir se va a vender por algo más de 1.200 euros cuando el metro cuadrado de vivienda ya construida en La Rioja es de 1.322 euros.”. Según las cuentas del socialista, lo que costará solo el suelo de una vivienda en esta zona ronda los 117.000 euros por lo que se preguntó si tiene salida hoy en día una vivienda así, “no es serio, ni creíble”. Mucho más en estos tiempos en los que el mercado inmobiliario sigue sin despegar, entre otros motivos, apuntó Urquía “por el alto nivel de paro, la pérdida de población que está sufriendo Logroño y porque el crédito sigue sin llegar a las familias”.

“En siete años, vamos a tener la ciudad a pan y agua”, insistió Urquía y de hecho calculó que “el Ayuntamiento de Logroño deberá endeudarse una media de diez millones de euros al año, una cantidad a la que hay que sumar los préstamos habituales por lo que la cifra puede subir a los 13 millones de euros de endeudamiento al año”. Y así aparece reflejado en el informe del interventor. “El compromiso que ahora se adopta es evidente que incidirá en el resto de decisiones presupuestarias: primero por la fuerza de obligacional que el compromiso plurianual impone y, segundo, por su alto volumen a largo plazo”.

Los socialistas consideraron que la alcaldesa de Logroño ha actuado con “oscurantismo y desprecio” hacia la oposición y hacia el Consejo Social de la Ciudad. “Nos enteramos del acuerdo 45 minutos antes de que Gamarra compareciera ante los medios de comunicación y el Consejo Social de la Ciudad se reunió hace quince días y tampoco se les informó de nada”, apuntó Dorado.

Sin embargo y pese a todo, ayer los socialistas no sabían cuál iba a ser el voto del grupo municipal en el pleno extraordinario que se celebra a la una de esta tarde. “Será el Comité Local el que decida el sentido del voto del grupo”, concluyó ayer Dorado.