“Quieren amordazarme con sus demandas pero iré hasta el final en la defensa de la Sanidad”

"Quieren amordazarme con sus demandas pero iré hasta el final en la defensa de la Sanidad"

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Si hace unas semanas Miguel González de Legarra hacía pública la denuncia presentada contra él por Mari Luz de los Mártires en la que le reclama 36.000 euros, ahora es la empresa Viamed la que inicia un procedimiento similar solicitando al líder regionalista 50.000 euros de indemnización. En ambos casos, tanto la gerente del Seris como la empresa privada, dicen sentirse perjudicados por las continuas declaraciones de González de Legarra en torno a las privatizaciones de la sanidad pública.

Lo primero que ha llamado la atención del regionalista al recibir la demanda, es que procede del Tribunal de Primera Instancia número 74 de Madrid. “Se detalla a la perfección que la empresa Viamed ha recurrido a los juzgados madrileños porque es en esa comunidad donde tienen su sede social y fiscal”, ha explicado, “lo que echa por tierra sus continuas afirmaciones asegurando que todos los beneficios obtenidos revierten únicamente en La Rioja, ya que se demuestra ahora que sus impuestos los pagan en Madrid y no aquí”.

Además, una vez estudiado el documento, Legarra ha afirmado que la denuncia de Viamed es prácticamente igual a la de Mari Luz de los Mártires, basándose en los mismos argumentos. “Viamed está confundiendo la defensa que yo realizo de los intereses ciudadanos en el ámbito de la sanidad con un ataque a sus intereses”, ha afirmado, “tengo claro que se trata de una maniobra orquestada entre el propio Gobierno y la empresa, presentando ambas demandas, para intentar intimidarme, amordazarme y callarme”.

A pesar de ello, ha querido dejar claro que “aunque siempre es preocupante verte en los tribunales”, no tiene intención de amedrentarse, “he aportado documentos que ratifican cada una de sus afirmaciones y he instado a la empresa Viamed a que niegue todo lo que yo he hecho público, no van a callarme porque iré hasta el final”.

Considera además que se trata de una estrategia del miedo que no sólo va dirigida contra su persona o su propio partido sino que es también “una forma de enviar un mensaje de advertencia a a todos aquellos que se han implicado en la defensa de la sanidad pública”.

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