Manos riojanas para ayudar a poner en marcha una escuela en Kenia

El próximo 14 de enero, Elena López Davalillo, vecina de Ollauri, partirá rumbo a Kenia junto a otros voluntarios para poner en marcha una escuela en el pueblo de Lokitaung, situado en la región de Tucana, al norte del país.

Un área especialmente desfavorecida en la que la ONG Amor sin Barreras, nacida en Rioja Alavesa de la mano de Ana Baz, quiere ayudar a construir un futuro para 30 pequeños con el nuevo colegio, que se inaugura el 18 de enero.

Según explica la web de la ONG, el CEI Pole Pole Olabide tendrá tres aulas, comedor, cocina, aseos con duchas y una zona de juegos exterior.

Además del programa educativo, que buscará potenciar los valores de la sociedad turkana, el centro contará con una iniciativa para la inteligencia emocional, así como un plan nutricional.

Estará en colaboración estrecha con la clínica pediátrica Santa Marta de Aztívate Foundation, que se encuentra también en el lugar.

Para la financiación, la ONG mantiene la iniciativa 'Los 100 de Turkana', en la que pueden trabajar empresas y autónomos. Según explica Elena López, el objetivo es contar al menos con 100 empresas (y una aportación de 1.000 euros por cada una) para garantizar el funcionamiento de la escuela durante tres años.

Asimismo, también anima a personas a título particular a que se hagan socias de Amor sin Barreras para apoyar estos proyectos. “Cualquier aportación es bien recibida y se puede ayudar de un montón de maneras”, recalca, poniendo el acento tanto en el proyecto como en la “transparencia” de la ONG a la hora de rendir cuentas de cada iniciativa y de su financiación.

A nivel personal, esta riojana asegura que “es un sueño” “Yo llevaba bastante tiempo con voluntariado porque me aporta mucho: la asociación de enfermedades raras, Hospital Imaginario...”, explica, apuntando que de este viaje, de un mes de duración inicial, está convencida de que va a obtener “mucho más de lo que voy a dar, segurísimo”.

Y destaca el “maravilloso” proyecto que supone abrir esta escuela, tanto para los niños y niñas que se beneficiarán de ella como para el conjunto de la zona: “sirve también para crear una infraestructura, una economía, además de aportar mayor calidad de vida a los niños”.

Imágenes: Amor sin Barreras